Cabe destacar que una reintroducción de la pena capital significaría cortar vínculos con el Consejo de Europa.
Por: Miguel Vélez Tirado
Para reintroducir la pena capital, la cual fue abolida en 2004, Turquía necesitaría convocar un segundo referendo constitucional, debido a que los diputados partidarios de esta reforma no alcanzan la mayoría necesaria de dos tercios en el Parlamento. La tendencia a favor de la pena de muerte gana forma por el resentimiento contra “los rebeldes”, quienes fueron los responsables del ataque perpetrado que tenía como objetivo derrocar al presidente turco Recep Tayyip Erdogan.
Cuando ocurrieron los hechos que buscaron arrebatarle el poder, Erdogan había dicho que “los asesinos y quienes los apoyan recibirán su castigo”, asegurando además que “no os preocupéis, después de 16 de abril, si Dios quiere, el Parlamento hará lo necesario respecto a la petición de la pena de muerte”.
Cabe destacar que una reintroducción de la pena de muerte significaría cortar vínculos con el Consejo de Europa y aplomar las negociaciones con la Unión Europea, aunque el presidente de Turquía ha mencionado que no le importa, aseverando que “solo nos interesa lo que diga el pueblo”, frase que ha repetido insistentemente desde el año pasado.