En un mundo donde las economías dominan a los titulares, la pregunta de qué hace feliz a una nación ha cobrado fuerza en los últimos años. El Índice de Grandes Potencias 2024, liderado por el inversionista y filántropo Ray Dalio, busca responder esta pregunta a través de un análisis detallado de las principales economías.
Este índice no sólo estudia el crecimiento económico, sino también factores de bienestar emocional y social, logrando un acercamiento a lo que puede considerarse una «medida colectiva de felicidad». En su edición 2024, el índice destaca al Reino Unido como el país más feliz entre las 24 economías principales del mundo, un hallazgo inesperado que refleja la complejidad de los indicadores de felicidad.
Por qué es importante: La felicidad de una población es un factor fundamental para evaluar el desarrollo humano, pues influye en la estabilidad social y política, en la calidad de vida y, en última instancia, en la economía de los países.
Este índice nos invita a reconsiderar la relación entre economía y bienestar, ya que sugiere que un país puede ser próspero en términos de PIB sin necesariamente traducirse en altos niveles de satisfacción personal y social. Este enfoque ha cobrado relevancia en los últimos años, especialmente a medida que crecen los debates sobre el agotación de las fórmulas económicas tradicionales para alcanzar el bienestar colectivo.
Metodología de evaluación: Dalio y su equipo analizaron múltiples dimensiones para elaborar el Índice de Grandes Potencias, incluyendo tanto factores “internos”, como la satisfacción personal, como factores “externos”, como el ambiente social y la calidad de las relaciones interpersonales. Las métricas específicas evaluadas fueron:
- Porcentaje de personas que se consideran felices.
- Satisfacción general con la vida en una escala del 1 al 10.
- Porcentaje de personas que disfrutan su día a día.
- Nivel de apoyo social percibido.
- Tasa de suicidio, medida en función de cada 100.000 habitantes.
Cada país recibió una puntuación en función de estos factores, calculada mediante un análisis de desviaciones estándar (puntuaciones z) para identificar qué tanto se apartaban de los medios mundiales en cada uno de estos elementos. La evaluación no pretende ser una medida definitiva de la felicidad, pero sí ofrece una comparativa valiosa que incluye tanto a las potencias económicas como a economías emergentes.
Según el Índice de Grandes Potencias, el Reino Unido ocupa el primer lugar en felicidad entre las 24 principales economías. Este resultado es interesante, ya que otras fuentes, como el Informe Mundial de la Felicidad de la ONU, lo ubican en el puesto 20 entre 143 naciones. El índice de Dalio se distingue por enfocarse en detalles específicos que van más allá de los ingresos per cápita, revelando la resiliencia y satisfacción de las generaciones mayores en el Reino Unido, quienes parecen haber encontrado mayor estabilidad en sus vidas.
Indonesia, ubicada en el segundo lugar, destaca por su alto porcentaje de ciudadanos que se consideran felices, con un 79% de la población, superando así el promedio global del 73%. México y Brasil también figuran en el top 10, reflejando una particular combinación de resiliencia social y optimismo a pesar de los retos económicos. En el caso de México, el sentido de comunidad y las redes de apoyo social han sido factores esenciales para mantener la satisfacción en su población.
Los 10 países más felices del mundo en 2024
Un dato notable es que Estados Unidos ocupa el décimo lugar, a pesar de ser la economía más poderosa del mundo. Este puesto relativamente bajo sugiere que la fortaleza económica no siempre se traduce en altos niveles de felicidad, especialmente cuando los datos muestran una disminución en el bienestar general entre las generaciones jóvenes de Estados Unidos.
Detalles: A nivel metodológico, Dalio ha señalado que un país como el Reino Unido logra mantenerse entre los primeros puestos en gran medida debido a sus políticas de bienestar y el acceso a servicios públicos de calidad. Sin embargo, Indonesia es el país con el mayor porcentaje de ciudadanos que se consideran felices, algo que podría explicarse por una cultura social y familiar fuerte que brinda apoyo emocional. En el caso de Estados Unidos, la felicidad ha decaído en los últimos 20 años, posiblemente debido a factores como la desigualdad, el alto costo de vida y la falta de redes de apoyo para las generaciones más jóvenes.
Por otro lado, países como Corea del Sur e India aparecen en los últimos lugares. En el caso de Corea del Sur, la presión social y la insatisfacción con el clima político parecen tener un impacto significativo en la percepción de bienestar, mientras que en India se destaca una profunda desconfianza en las instituciones y la falta de movilidad social, lo que afecta la felicidad de sus ciudadanos.
Contexto y comparación global: Estos resultados contrastan con estudios anteriores como el Informe Mundial de la Felicidad, que suele colocar a países nórdicos como Finlandia y Noruega en los primeros lugares, gracias a su robusto estado de bienestar. Sin embargo, el Índice de Grandes Potencias de Dalio se centra en economías que enfrentan desafíos globales de gran escala, como el cambio climático y la presión poblacional, lo que añade una dimensión especial al análisis de la felicidad en las principales economías.
Panorama general: El índice de felicidad de Dalio ofrece una perspectiva refrescante sobre cómo las economías más avanzadas del mundo pueden aprender de economías emergentes en temas de felicidad y satisfacción personal. Esta comparación también plantea la necesidad de redefinir el progreso y el éxito de una nación no sólo por su PIB, sino por la calidad de vida y el bienestar social de sus habitantes.
A medida que el mundo sigue buscando un equilibrio entre crecimiento económico y felicidad, el índice de Dalio invita a reconsiderar los modelos de desarrollo actuales. La inclusión de factores emocionales y sociales en las métricas de progreso puede ser clave para construir sociedades más felices y resilientes.