A menos de dos años para las elecciones presidenciales, el clima político en Colombia está marcado por una profunda polarización, un electorado dividido entre las propuestas de derecha e izquierda y un centro fragmentado que lucha por no perder protagonismo. La última encuesta de Invamer, publicada en octubre de 2024, refleja un país en busca de líderes que respondan a las principales preocupaciones de los colombianos: la inseguridad, la corrupción y la gestión económica. Este contexto es el escenario perfecto para el surgimiento de líderes de peso y el desafío del centro para consolidarse como una opción real.
Panorama general: La encuesta de Invamer deja claro el pulso de la nación: un 67.1% de los encuestados siente que el país va “por el camino equivocado”. Los ciudadanos identifican a la inseguridad como el problema más acuciante (24.8%), seguida de cerca por la corrupción y el desempleo, que afectan de manera directa la economía de los hogares colombianos. En este contexto, la demanda por propuestas concretas y con visión de largo plazo es más urgente que nunca.
Entre las preocupaciones de los colombianos, la inseguridad destaca como el principal problema, con el 24.8% de los encuestados mencionándola. La corrupción, el desempeño del gobierno, la economía y el desempleo también figuran como problemas críticos. En cuanto a las dificultades que afectan directamente a los hogares, la economía y la inseguridad ocupan los primeros lugares, seguidos por el desempleo y el costo de vida.
Análisis del escenario político en Colombia: Encuesta Invamer y elecciones presidenciales 2026
Las figuras del centro político colombiano, encabezadas por Sergio Fajardo, Claudia López y Juan Manuel Galán, enfrentan un dilema. Mientras Fajardo es visto como una figura con coherencia en su trayectoria política, López es criticada por falta de consistencia, y Galán, aunque popular en las encuestas iniciales, tiende a perder apoyo en el transcurso de las campañas. La pregunta es: ¿podrán dejar de lado sus diferencias y converger en una candidatura única o seguirán caminos separados?
La encuesta Invamer muestra que el 20.2% de los colombianos estaría dispuesto a participar en una consulta de centro, un porcentaje inferior al registrado en la izquierda y la derecha. En un panorama donde la polarización toma fuerza, el centro podría convertirse en una alternativa atractiva para los indecisos, siempre y cuando logre resolver sus divisiones y unificar sus candidaturas. Una consulta abierta entre los aspirantes centristas en 2025 podría ser un mecanismo clave para evitar la fragmentación.
En la derecha, Vicky Dávila se perfila como una posible candidata sorpresa. Con un fuerte respaldo de la opinión pública y la posibilidad de lanzarse a través de un movimiento de firmas, Dávila podría capitalizar la atracción mediática y convertirse en una opción fuerte dentro de un espectro donde también figuran nombres tradicionales.
Germán Vargas Lleras y Juan Carlos Pinzón destacan por sus credenciales y experiencia política, liderando las preferencias en las consultas de derecha según la encuesta. Vargas Lleras, con un 28.9% de intención de voto, y Pinzón, exministro y exembajador, han demostrado una capacidad de gestión y un dominio en el relacionamiento político que son cada vez más valorados por el electorado. Ambos cuentan con el respaldo de sectores empresariales y académicos, una base que podría consolidarse en una consulta abierta de la derecha en 2025.
Miguel Uribe Turbay, en el Centro Democrático, también es una figura destacada, aunque su capacidad para liderar el partido es incierta. Con un respaldo del 43.8% dentro del partido, Uribe se enfrenta a la posibilidad de fricciones internas, especialmente con figuras como María Fernanda Cabal, que cuenta con un 23.3% de apoyo en el mismo sector.
La izquierda y la coherencia de Gustavo Bolívar
Dentro del petrismo, Gustavo Bolívar se erige como una de las figuras más coherentes, aunque no está considerado como candidato presidencial por ahora. En su lugar, María José Pizarro parece tomar la delantera, respaldada por el propio Gustavo Petro. Sin embargo, aún no es claro si su candidatura podría captar un amplio apoyo en todo el país. Según la encuesta de Invamer, Petro cuenta con un 30% de “voto reserva”, un bloque significativo que podría inclinar la balanza en las elecciones, sobre todo si se moviliza con una candidatura de izquierda unificada.
Tras el gobierno de Iván Duque, ampliamente criticado por su falta de experiencia y su escasa habilidad para relacionarse con otros poderes del Estado, la ciudadanía parece valorar cada vez más a candidatos con una trayectoria sólida. En este sentido, Germán Vargas Lleras y Juan Carlos Pinzón parecen tener una ventaja sobre figuras menos experimentadas, como Miguel Uribe Turbay o María Fernanda Cabal, quienes aunque populares en ciertos sectores, carecen de la experiencia ejecutiva que podría demandarse en las próximas elecciones.
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