El Gobierno nacional confirmó que a partir del 16 de enero de 2026 entrará en vigor un nuevo incremento en las tarifas de los peajes en todo el país, una medida que impactará a todas las concesiones viales y que estará determinada por la variación anual del Índice de Precios al Consumidor (IPC). El ajuste hace parte del mecanismo de actualización previsto en la normativa vigente y se aplicará de manera generalizada en la red vial concesionada.
La ministra de Transporte, María Fernanda Rojas, explicó que el aumento corresponde al ajuste por costo de vida y busca preservar el equilibrio financiero del sistema de concesiones. Según indicó, se trata de una actualización ordinaria que permite garantizar la operación, el mantenimiento y el desarrollo de la infraestructura vial, sin la cual sería difícil sostener los estándares de servicio y seguridad en las carreteras del país.
Peajes subirán en Colombia desde el 16 de enero de 2026 según la inflación del IPC, según el Gobierno
De acuerdo con las cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), la inflación anual a noviembre de 2025 se ubicó en 5,30 %, porcentaje que servirá como base para el reajuste de las tarifas. En la práctica, esto significa que los valores de los peajes subirán en una proporción similar, aunque el impacto exacto variará según el contrato de cada concesión y la estructura tarifaria de cada estación.
El Ejecutivo reconoce que el tema es sensible, especialmente por su incidencia directa en los costos del transporte de carga, el precio de los tiquetes de buses intermunicipales y el gasto diario de miles de conductores. Por esa razón, en los últimos años se han venido aplicando mecanismos de alivio en algunos corredores viales y para ciertos grupos de usuarios.
Entre estas medidas se encuentran las tarifas diferenciales para comunidades que viven cerca de los peajes o para quienes usan con alta frecuencia determinadas vías, así como el aplazamiento de algunos incrementos y la implementación de esquemas de ajuste gradual en concesiones específicas, dependiendo de las condiciones contractuales. No obstante, estas decisiones no se aplican de forma homogénea en todo el país, ya que cada contrato tiene reglas y plazos distintos.

El anuncio del nuevo ajuste se produce en medio de un clima de inconformidad ciudadana que se ha intensificado tras alzas recientes, como la autorizada por el Instituto Nacional de Vías (Invías) a comienzos de año, que permitió incrementos de hasta 30 % en ocho estaciones de peaje. Este antecedente ha alimentado el malestar entre transportadores y usuarios frecuentes de las carreteras.
Actualmente, algunos de los peajes más costosos para vehículos de categoría I se concentran en corredores estratégicos de Antioquia, Meta y la vía hacia la Orinoquía, zonas clave para el comercio y la movilidad regional. En este contexto, el nuevo aumento vuelve a poner sobre la mesa el debate sobre el modelo de concesiones viales y la necesidad de revisar su estructura desde el ámbito legislativo, ante las presiones que genera sobre la economía de los ciudadanos.