Diferentes entidades publicas, privadas y ONGs, señalan al presidente del país, Jair Bolsonaro, como el principal responsable de la crisis sanitaria en Brasil.
Por: Redacción 360 Radio
Abril se proyecta como el mes más díficil de Brasil en la pandemia, al punto que en varias ciudades del gigante sudamericano las muertes durante el mes superan a los nacimientos.
Durante la presente semana, el país ha registrado 8.747 decesos vinculados a la cepa brasileña del coronavirus, que se expande sin freno por todo el territorio nacional pese a las restricciones a la movilidad vigentes en buena parte de los estados brasileños.
El Ministerio de Salud también reportó recientemente 73.513 contagios, con lo cual el balance total de positivos es ahora de 13.673.507, aunque especialistas sanitarios estiman que, debido a la subnotificación, el número podría ser hasta “dos o tres veces” más alto.
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Entre las múltiples causas de que Brasil sea el epicentro mundial de la crisis sanitaria, la principal parece ser: la inacción del Gobierno que dirige el presidente Jair Bolsonaro y su promoción de curas ineficaces, lo que ha causado muertes evitables y agravado la epidemia hasta llevar los hospitales al colapso, según coinciden en un estudio publicado en Science y la ONG Médicos Sin Fronteras.
Brasil sigue con una curva ascendente y bate un récord tras otro de muertes y contagios, mientras la epidemia entra en recesión en muchos otros países.
El país fue el primer país donde hubo manifestaciones contra las restricciones. Más de 350.000 muertos después, todavía se celebran protestas contra los confinamientos mientras el presidente insiste en que “el hambre mata más que el virus”. Lo que también evidenciaria las acciones de la población durante la crisis y no solo la ideología del mandatario. Científicos y médicos brasileños llevan meses insistiendo en que sin un confinamiento estricto de 3-4 semanas es imposible frenar la transmisión.