El registrador Nacional Alexander Vega será citado en las próximas semanas por parte de la oposición para rendir cuentas sobre los más de 300 mil votos perdidos para algunos partidos de centro y de izquierda.
Por: Redacción 360 Radio
Pese a las múltiples denuncias por pérdida de votos, la oposición citará al registrador nacional Alexander Vega ante la plenaria del Senado; para que responda y dé cuenta sobre los más de 300 mil votos que se habrían perdido en el escrutinio de las elecciones de Congreso del domingo 13 de marzo.
El candidato presidencial Gustavo Petro solicitó el reconteo de votos señalando que, «con un sistema de detección temprana que estrenamos, hemos detectado 29.000 mesas de 112.000 que hay en todo el país donde no existe un solo voto por el Pacto Histórico, eso no es posible dada la magnitud de la votación ya demostrada, allí ya se están haciendo los procedimientos del caso para abrir esas mesas y contar voto por voto».
Adicionalmente, el senador Gustavo Bolívar señaló que en los escrutinios ya están empezando a aparecer los votos que les «robaron» los cuales les podrían dar dos curules más, teniendo presente que según sus cuentas la cantidad de votos desaparecidos oscila entre los 300 mil.
«Yo creo que a la oposición nos corresponde, vamos a citar un debate de control político porque lo que aquí está ocurriendo es absolutamente grave. En mi caso, es como si no hubiera estado en el Congreso, como si me la hubiera pasado de escándalo en escándalo, como si no hubiera hecho campaña como para que viera reducida mi votación de esa manera como lo está diciendo la Registraduría», señaló Antonio Sanguino, senador de la Alianza Verde y uno de los citantes a la plenaria.
Sanguino señaló que ha recibido información de votos no registrados, la alteración de formularios E-14 e inconsistencias en el preconteo de votos y señaló que esto se le suma a las más de 29.000 mesas denunciadas por el Pacto Histórico y por Fuerza Ciudadana.
El senador liberal Guillermo García señaló, «hay muchas motivaciones para un debate, como es la compraventa descarada de votos a través de mermelada de los gobiernos nacional, departamentales y municipales, hay una vulgaridad a partir de la caída de la Ley de Garantías, como mal ejemplo para todos los gobernantes. Hay votaciones muy sospechosas, muy altas para algunas organizaciones políticas y recortes para ciertos candidatos de centro, centroizquierda e izquierda».
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