Análisis de dos años del gobierno Luis Pérez

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El gobernador Pérez tuvo que afrontar la realidad de un departamento con pocos recursos económicos, un desorden administrativo y falta de gobernabilidad en los 125 municipios.


Por: Redacción 360 Radio

Antioquia de por sí es un departamento bien complejo, no solo por su extensión y topografía, si no la variedad de sectores productivos, sociales, económicos y étnicos. Eso sin tener en cuenta factores políticos coyunturales como la evidente desconexión entre el departamento y el gobierno central. El presupuesto ni siquiera iguala al de Medellín, es muy poco lo que se tiene para atender las demandas de aproximadamente 115 municipios, pues se podría decir que 10 tienen una autonomía importante y necesaria para el balance de las finanzas.

Pérez llegó al poder no solo por unas bases sociales importantes que recordaban su paso por la Alcaldía de Medellín, sino también por la gran coalición política que se hizo para ayudarlo a llegar al primer cargo del departamento. Contaba con todo el aparato político y social, algo elemental para ser elegido gobernador. Tuvo en contra al Grupo Empresarial Antioqueño y a los medios tradicionales de comunicación bogotanos, quienes hoy lo buscan por cielo, mar y tierra ofreciéndole el mundo a cambio de tener buenas relaciones en materia publicitaria. Pasaron de cuestionarlo por oídas e informaciones sin fundamento, a tenerlo en un altar.

Uno de los líos que pudo tener Luis Pérez fue en la conformación de su gabinete. Desde los rumores, las confirmaciones, los que se fueron rápido, los que llegaron y partieron, los que permanecen con dificultades y los que aún no se adaptan, han perjudicado el desarrollo eficiente del plan de desarrollo Antioquia Piensa en Grande. En tal virtud el gobernador ha pedido cada año la renuncia protocolaria a todo su gabinete y ha hecho algunos ajustes, transferencias, retiros y nombramientos. Con la campaña del congreso muchos duraron solo un año, renunciaron y se fueron.

Las obsesiones del gobernador han sido varias y en ellas trabaja día a día; la transparencia en los procesos, la pavimentación de vías terciarias, la recuperación económica del departamento y el orden y normal desarrollo del posconflicto en Antioquia. Lo anterior no le resta importancia a las otras caras de esta administración, ni más faltaba, solo que él mismo se ha querido encargar de estos particulares que son gruesos y liosos. En sus consejos de gobierno se tratan todos los temas, de la A a la Z, reparte instrucciones, felicitaciones, regaños y da conceptos. En este segundo año por fin entregó la “Tortuga de Oro”, un premio al funcionario o dependencia más lenta de la Gobernación de Antioquia.

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El proceso de paz le ha sacado canas de más al gobernador; sus constantes cartas al presidente Juan Manuel Santos muchas veces no gustan, sus comentarios hacia el comisionado de paz o las Farc tampoco han sido cariñitos, por el contrario siempre han sido caracterizadas por ser vehementes, estrictas, duras pero constructivas. No es de más, Antioquia ha sido uno de los departamentos que mas ha padecido el conflicto en Colombia y eso le da una preponderancia al asunto, por lo cual garantizar el normal desarrollo del posacuerdo se hace menester inaplazable.

Para todo se necesita dinero y Antioquia necesita una cuantiosa inversión en sus líneas de proyectos. La gobernación y el IDEA están sacando adelante la colocación de títulos de Hidroituango parara traer flujo del futuro y poder recibir un billón de pesos para el presupuesto con el cual se puedan activar proyectos como el ferrocarril de Antioquia. En todo este esquema ha sido fundamental las reuniones que empezó a implementar este año con los alcaldes de todo Antioquia en un espacio llamado “Un Café con el Gobernador”, que tiene lugar en el piso 12 en el salón Pedro Justo Berrío. Ahí a podido conocer de primera mano las problemáticas más profundas de los territorios más recónditos y trata de ir haciendo derroteros para solucionar en mediano o largo plazo todo lo que se plantea.

A finales del año 2018 se espera que el gobernador pueda entregar la megaobra del Túnel de Oriente, proyecto que fue iniciado en la administración de Luis Alfredo Ramos y estuvo parado durante la que presidió Sergio Fajardo Valderrama. En el 2019 seguramente entregará Hidroituango, una obra que también fue de la gobernación Ramos Botero. Muy probablemente de la gobernación Luis Pérez en cuanto a proyectos grandes, veremos sus resultados en dos, tres o cuatro años, todo dependiendo de que su sucesor le de continuidad a esas obras. ¿Hoy qué tiene Antioquia gracias a la gobernación de Luis Pérez? mucha más presencia institucional en toda Antioquia; mejor relacionamiento con los alcaldes; mejores índices de seguridad; mejores balances económicos; recuperación de la visión a largo plazo; el inicio de grandes proyectos; la pavimentación de más de 900 kilómetros m de vías terciarias y una voz más fuerte ante el Gobierno Nacional.

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Traer recursos de la venta de ISAGÉN para el departamento fue un gran logro del gobernador Pérez que luego fue copiado por otros mandatarios a nivel nacional. La defensa de Belén de Bajirá ante un despropósito del gobierno central y del departamento del Chocó; como también la defensa de la asignación de recursos esenciales para los programas de alimentación PAE y al sistema de salud. La pelea contra las rentas ilegales también ha sido clave en los buenos resultados que se han obtenido en la guerra contra las estructuras criminales.

Le tocará al gobernador Luis Pérez Gutiérrez pisar el acelerador un poco más, redoblar esfuerzos, exigir el doble y buscar muchos más recursos, si quiere terminar con broche de oro estos dos años que le quedan. Más por que se irán más rápido, son años políticos; elecciones congreso, presidencia, concejos, asamblea, alcaldías y gobernación. La ley de garantías que se repetirá con más frecuencia supone unos procesos más lentos, difíciles, engorrosos y que pueden frenar la velocidad del gobierno. Uno de los retos es tener más que buenas relaciones con el próximo presidente; esto se vuelve fundamental a la hora de concretar el cierre financiero de grandes proyectos y la estabilidad de un sistema tan deficiente como el de salud.

La percepción de Luis Pérez en la opinión pública es positiva, ha logrado revertir lo que muchos decían y pensaban de él. Está demostrando que con poco está haciendo mucho. Los gremios, las empresas, la academia, alcaldes y el Gobierno Nacional deben rodear mucho más esta administración para sacar adelante proyectos que beneficiaran a millones de antioqueños.

 

 

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