El Gobierno enfrenta un nuevo remezón interno con la salida de Angie Rodríguez, una de las funcionarias de mayor influencia en la estructura administrativa de la Presidencia. Su renuncia, solicitada directamente por el presidente Gustavo Petro, se da en medio de tensiones acumuladas y decisiones que marcaron fracturas dentro del alto gobierno.
La dirección del DAPRE ha sido uno de los cargos más sensibles del actual mandato, y la salida de Angie Rodríguez evidencia un nuevo episodio de desalineación interna frente a nombramientos estratégicos y al manejo de sectores clave como salud.
¿Por qué sale Angie Rodríguez?
De acuerdo con versiones cercanas a la Casa de Nariño, el detonante fue su oposición al nombramiento de José Alexis Mahecha en un cargo directivo dentro de una entidad adscrita al sector Hacienda. Este desacuerdo escaló hasta convertirse en un conflicto abierto que obligó al presidente a pedirle la renuncia.
La postura firme de Angie Rodríguez frente a esa designación se interpretó dentro del Gobierno como un quiebre en la coordinación política, en un momento donde Petro busca cohesión para el cierre de su mandato.
Además, Rodríguez ya enfrentaba tensiones por la acumulación de funciones tras haber sido designada como superintendente ad hoc de Salud para asuntos relacionados con la Nueva EPS. Ese rol adicional, sumado a decisiones que generaron controversia como la aceptación de la renuncia de la interventora de la misma entidad, terminó por dejarla en el centro de un desgaste político que se intensificó en las últimas semanas.
A esto se suma un punto no menor: la alta rotación en la dirección del DAPRE. Con su salida, este será uno de los cargos más cambiantes de la administración Petro, lo que evidencia una dificultad persistente para mantener una línea estable de coordinación administrativa desde la Casa de Nariño.
En reemplazo de Angie Rodríguez, fuentes del Gobierno afirman que la opción más cercana es Letty Leal, quien actualmente se desempeña como subdirectora. Su eventual llegada marcaría un intento de estabilizar el equipo directivo y aliviar las tensiones generadas en los últimos meses.
La salida de Angie Rodríguez no solo representa un relevo administrativo, sino un reflejo de las disputas internas que siguen configurando el mapa político del Gobierno en la recta final del cuatrienio. Cómo avance esta transición y qué implicaciones tendrá para sectores como salud y coordinación interinstitucional será clave para las próximas semanas.
