En lo corrido del 2016 alrededor de 73 personas han muerto en el intento de una selfie popular. Desde 2014 la cifra aproximada es de 127 casos de selfie mortales, el 73,5 % son hombres de las víctimas son hombres.
Por: Luis Enrique Castro.
Selfie es una palabra que hoy día hace parte de nuestro vocabulario y cultura, cada día las redes sociales giran más en torno a lo gráfico y las nuevas generaciones son más visuales que ninguna otra.
Cada semana la palabra selfie es mencionada en publicaciones de Facebook en 365 mil publicaciones, 150.000 tuits y en Instagram hay unos cincuenta millones de fotos etiquetadas como Selfies. Esto según datos del New York Times.
Además de calcula que el 30% de las fotos que toman los jóvenes entre 18 y 24 años son autorretratos. Una de cada tres instantáneas tiene como objetivo su propio yo.
Las cifras se ponen más alarmantes cuando en lo corrido del 2016 alrededor de 73 personas han muerto en el intento de una selfie popular. Desde 2014 la cifra aproximada es de 127 casos de selfie mortales, el 73,5 % son hombres de las víctimas son hombres.
Estos alarmantes datos se dieron a conocer en un estudio realizado por seis investigadores de la Universidad Carnegie Mellon, el Instituto de Información Tecnológica de Nueva Delhi y el Instituto Nacional de Tecnología de Tiruchirappalli, también en India.
En la actualidad con la presión de subir imágenes a nuestras redes sociales que ganen likes o me gusta, las personas están realizando cada vez tomas más arriesgadas y ponen en peligro su vida.
La preocupación crece a nivel mundial debido a que estas tomas siguen apareciendo y las selfies consumen cada vez más a una sociedad, que en medio de su afán por ser popular, no les importa los riesgos al momento de capturar un autorretrato y a veces el costo es la vida.
La selfie en la historia
La genealogía de la selfie nos remonta a principios del siglo XX: Edvard Munch, mientras se recupera de una depresión en una clínica de Copenhague en 1908, se toma una foto a sí mismo, tal vez para demostrarse que está mejor; seis años después, la duquesa Anastasia Rikolaevna, que entonces tenía trece años, se hace un autorretrato para enviárselo a un amigo; en 1920, los fotógrafos de la Byron Company de Nueva York se hacen la primera selfie de grupo. Se trata de un proceso de paulatino alejamiento, que conduce al selfie-stick.
Igualmente, sí lo analizamos en términos de relación con las personas las selfies aíslan más a una sociedad con problemas de interacción. Anteriormente para tomarte un autorretrato debías interactuar con otra persona en solicitud de ayuda, hoy en día solo necesitas el ‘selfie stick’ y nada más.