Bogotá se prepara para un momento sin precedentes. Este domingo 12 de octubre, a las 10 de la mañana, la ciudad presenciará la implosión de los puentes de la intersección de Puente Aranda, un procedimiento que transformará completamente este punto neurálgico donde se cruzan la calle 13, la calle Sexta, la avenida de Las Américas y la carrera 50.
El Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) confirmó que el operativo está listo y que la implosión será ejecutada por la empresa ATILA, con más de 25 años de experiencia en demoliciones controladas en el país. Según el director del IDU, Orlando Molano, el objetivo es dar paso al primer tramo de La Nueva 13, una megaobra de tres niveles que promete descongestionar el suroccidente de Bogotá.
Implosión en Puente Aranda: un proceso técnico y milimétrico
En los tableros y columnas de los puentes ya se instaló el indugel, un gel industrial diseñado para que las estructuras colapsen hacia su centro, minimizando los impactos en el entorno. Esta será la primera vez que Bogotá realiza una implosión de puentes vehiculares, un hito en la ingeniería urbana de la capital.
Y sí: la implosión durará exactamente 11 segundos. Ese es el tiempo que tardarán los puentes en caer después de la detonación controlada. Sin embargo, el retiro total de los escombros tomará cerca de dos meses, un plazo considerablemente menor al de una demolición convencional, que podría extenderse hasta un año.
La jornada del domingo tendrá tres alarmas previas: una a las 9:30 a. m., otra a las 9:45 a. m. y la última un minuto antes de la detonación. Las autoridades han dispuesto tres anillos de seguridad: a 50 metros no podrá haber personas ni animales; a 100 metros, evacuación total; y a 150 metros, solo personal autorizado y equipos de emergencia.
El IDU recalcó que la implosión será transmitida en vivo por las redes sociales de la Alcaldía de Bogotá y del Instituto, para que la ciudadanía pueda presenciar el procedimiento de forma segura y sin acudir al lugar.
La implosión también tiene un componente ambiental
El proceso incluyó el traslado de 178 árboles y la protección de la fauna del sector. En total, serán reubicados 270 árboles y se sembrarán más de 700 nuevos como parte de la construcción de La Nueva 13. Además, los 7.900 metros cúbicos de concreto y asfalto generados por la implosión serán reutilizados dentro del mismo proyecto.
Durante el fin de semana se implementará un Plan de Manejo de Tránsito que contempla cierres en la avenida Las Américas, la calle 13 y la carrera 50, además de suspensiones temporales en las estaciones de TransMilenio Puente Aranda y Distrito Grafiti entre las 5:00 a. m. y las 2:00 p. m.
El nuevo intercambio vial contará con una glorieta principal de 200 metros, una segunda exclusiva para TransMilenio y dos puentes vehiculares de 520 metros. Así, en apenas 11 segundos de implosión, Puente Aranda dejará atrás más de 40 años de historia para dar paso a una nueva era de movilidad en Bogotá.