Panorama general: Según el último reporte de la CAR, con corte al 28 de enero, los niveles de los embalses que abastecen a Bogotá han mostrado una tendencia mayormente descendente. El embalse de Neusa, aunque presenta el nivel más alto con un 79,82% de su capacidad, ha experimentado una leve pérdida de 0,089 millones de metros cúbicos, lo que subraya la necesidad urgente de intervenir en su capacidad de almacenamiento.
Para enfrentar esta problemática, se ha diseñado un ambicioso proyecto de ampliación del embalse, que incluirá la extracción de cerca de tres millones de metros cúbicos de sedimentos acumulados en el lecho del reservorio. Esta medida busca recuperar la capacidad original del embalse y asegurar que el suministro de agua a los municipios circundantes no se vea comprometido.
Embalse de Neusa: Cundinamarca refuerza su infraestructura hídrica para mitigar la crisis del agua
Por qué es importante: La intervención en el embalse de Neusa es solo una parte de un plan más amplio que involucra varias acciones para fortalecer la infraestructura hídrica de la región. El gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, y el director de la CAR, Alfred Ignacio Ballesteros, anunciaron que, además de la restauración del embalse, se llevarán a cabo proyectos de reforestación y restauración ecológica en más de 40 hectáreas del complejo ambiental del Neusa. Estas acciones están diseñadas para recuperar y proteger las fuentes hídricas de la región.
El proyecto también incluirá la construcción de nuevos reservorios, la compra de predios en zonas de páramo, y la perforación de pozos profundos en varios municipios, con el fin de garantizar el abastecimiento de agua potable para los pobladores. Estas iniciativas beneficiarán a localidades como Zipaquirá, Cogua, Tausa, Sutatausa, Cucunubá, Nemocón, y el norte de Bogotá, donde la situación del agua es particularmente crítica.
Avances en la infraestructura hídrica
Una de las medidas más prometedoras es la construcción de diez pozos profundos en 11 municipios de la Sabana de Bogotá. El gobernador Rey expresó que para el 2027, estos pozos estarán perforados y podrán satisfacer hasta el 70% de las necesidades de caudal de los municipios que actualmente dependen de la compra de agua en bloque a la capital. Este proyecto contribuirá a reducir la dependencia de los acueductos bogotanos y fortalecerá la autonomía hídrica de la región.
En paralelo, la CAR y la Gobernación de Cundinamarca continúan con el programa «Cosecha de agua comunitaria», que busca promover el uso eficiente del agua y la adaptación al cambio climático. Hasta la fecha, se han entregado más de 64.000 kits de almacenamiento de agua de lluvia, y este año se distribuirán 15.000 nuevos kits con una inversión de casi $48.000 millones. Esta iniciativa beneficiará tanto a hogares urbanos como rurales, ayudando a mitigar la escasez de agua en épocas de sequía.