Confidenciales 360.
El expresidente César Gaviria ha sido una persona muy habilidosa, pues varios sectores de la población colombiana han cometido el error de subestimarlo a él y al presidente Santos.
Los expresidentes, por más que no hayan sido buenos, si han llegado a esos cargos es porque algo han sabido hacer, y César Gaviria tiene claro que su prioridad es Simón Gaviria. Bajo ese parámetro, se entiende que él no trabaja ni siquiera para el beneficio del partido Liberal sino para el de su hijo, es por esto que influenció para que dicha colectividad no declinara la candidatura y se pegara por ejemplo a la de Fajardo, pues es consciente que necesita valorizar la votación que tendrá Humberto de la Calle para posteriormente negociar.
El único punto esencial de la negociación sería saber a qué ministerio llegaría Simón Gaviria, pues su padre tiene claro que en el 2022 su hijo será candidato presidencial. Gaviria, fuera de moverse más que bien en los círculos sociales y politicos de Bogotá, tiene influencia a través de medios de comunicación y una ascendencia realmente importante a la hora de hacer jugadas maquiavélicas.
César Gaviria va a buscar que su decisión sea eficiente y coherente para no terminar crucificado por la actuación que él decida hacer. Germán Vargas Lleras en algún momento estuvo muy cerca de nombrar a Simón Gaviria como fórmula vicepresidencial, pero por rumores en el caso Odebrecht lo descartó.
Así se mueve el ajedrez y habrá que esperar cómo terminan las fichas el 27 de mayo.