El exgobernador de Antioquia y precandidato presidencial Sergio Fajardo advirtió que la polarización política ha alcanzado niveles sin precedentes en Colombia y aseguró que el país está agotado de los discursos de confrontación que dominan el debate público. En una declaración difundida este viernes, Fajardo señaló que durante sus recorridos por diferentes regiones ha encontrado una ciudadanía marcada por el descontento, la incertidumbre y la frustración, factores que han deteriorado la confianza en las instituciones y en la clase política.
Fajardo explicó que la polarización se agudizó desde 2016 como resultado de las tensiones surgidas tras el plebiscito por la paz y que continuó creciendo durante momentos críticos como el estallido social de 2021.
Sergio Fajardo advierte que Colombia necesita un proyecto que supere la polarización
De acuerdo con el precandidato, este ambiente ha sido aprovechado por sectores radicales que necesitan dividir al país para fortalecerse y que terminan debilitando a las propuestas moderadas que buscan acuerdos.
Según él, los extremos han convertido la política en un escenario de enemigos que se enfrentan constantemente, lo que impide avanzar en soluciones urgentes para la seguridad, la desigualdad y la convivencia ciudadana.
En medio de este panorama, Fajardo planteó la necesidad de construir una nueva mayoría nacional basada en el respeto a la institucionalidad y en la capacidad de unir a ciudadanos y dirigentes moderados de distintas corrientes políticas.
Su propuesta no se limita al centro; busca integrar a personas de izquierda y derecha que rechazan la confrontación y que desean un país que funcione a partir de consensos básicos y acuerdos prácticos. Fajardo sostuvo que los verdaderos adversarios del país no son los colombianos entre sí; son la corrupción, los radicalismos, la violencia criminal y la cultura del odio que se ha instalado en la discusión pública.
El precandidato enfatizó que su proyecto presidencial quiere representar esta nueva mayoría y que su apuesta será dialogar con todos los sectores que compartan esta visión. Insistió en que el país necesita un gobierno que escuche, que entienda las desigualdades regionales y que trabaje por recuperar la seguridad en zonas donde las comunidades viven con temor por el avance de grupos armados. También afirmó que es posible construir una cultura ciudadana que recupere la confianza en la política y fortalezca la convivencia.
Fajardo fue claro al rechazar la idea de participar en consultas interpartidistas. En su opinión, estos mecanismos terminan beneficiando a los extremos y dejan sin margen de maniobra a las propuestas moderadas. Señaló que respeta a quienes tomarán parte en estos ejercicios, pero reiteró que su campaña seguirá un camino distinto para sumar respaldos y consolidar una opción competitiva para la segunda vuelta presidencial.
Su objetivo es reunir a la mayoría silenciosa que no se siente representada por la confrontación permanente.
También aseguró que su movimiento llega reforzado a esta etapa y que las encuestas lo muestran como una alternativa capaz de vencer a candidatos radicales. Añadió que ha aprendido de los errores del pasado y que ahora cuenta con un trabajo territorial más sólido y una visión más clara sobre el país que quiere construir. Concluyó invitando a quienes comparten su propósito a sumarse a una coalición amplia que permita superar el caos político y avanzar hacia un futuro basado en la unión y en soluciones prácticas.