Confidenciales 360.
No es nuevo hablar de la tendencia mundial que se da cuando los gobiernos vendan sus participaciones en empresas correspondientes a distintos sectores de la economía, pues los lineamientos internacionales y las buenas prácticas de gobierno indican que los gobiernos deben mermar su participación en el mercado y permitir que dichas actividades las ejerza el sector privado.
El Gobierno Nacional, tras muchos vaivenes, ha decidido, y así lo manifestó el ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas la semana pasada en Cartagena, que en los próximos días y antes que se acabe este gobierno se ejecutará la venta de las acciones (32.5) que el dicho gobierno tiene en la empresa multinacional Telefónica, que es Coltel.
El Gobierno reconoce que en las varias ocasiones que ha requerido capitalización de esta empresa, no es un buen negocio y es dispendioso para el Estado y fuera de eso le genera un papel de juez y parte en el sector de telecomunicaciones. Telefónica nunca le ha transferido dineros significativos al Gobierno, por lo cual no es más que un mal negocio para el Estado colombiano, y que cabe anotar, de la reforma tributaria se le inyectó dinero a Coltel, es decir, que los colombianos terminamos pagando impuestos para ir a meterle plata a Telefónica, una empresa española.
Une tiene el mismo escenario que Telefónica con el Gobierno, a diferencia que el que tiene participación en Une es el gobierno de la ciudad de Medellín con el 50% más una acción, una venta reciente que hizo Aníbal Gaviria Correa.
Una operación que para el concepto de muchos financieros estuvo mal hecha porque se debió haber vendido la totalidad de la empresa Une a Millicom. Hoy la compañía tampoco le ha transferido un solo peso a la Alcaldía como sí lo hace Empresas Públicas, y por el contrario hay alertas de la Contraloría donde indican que es muy probable una próxima capitalización de Une, lo que dejaría sin dinero para inversiones realmente importantes a esta Alcaldía y a los ciudadanos pagando impuestos para ir a capitalizar una multinacional.
La Alcaldía de Medellín ha evitado dar este debate, pero algunos concejales que sí están interesados en el patrimonio público y la estabilidad de las finanzas, por lo que han comenzado a investigar más sobre el tema y a tener claro el panorama, que es realmente preocupante.
Parece necesario que el gobierno local de Medellín revise con lupa lo que está haciendo el Gobierno Nacional con Telefónica y siga sus mismos pasos, si no quiere que su inversión se desvalorice y luego tenga que vender por un precio inferior como le va a tocar al alcalde Peñalosa en Bogotá con Etb, que hace algunos años cuando la quería vender le daban un valor supremamente superior al que le pueden dar ahora por el valor de la empresa.