Por: Redacción 360 Radio
Los delincuentes han ido desmantelando poco a poco el puente Alberto Pumarejo, la obra de infraestructura que construyeron sobre el río Magdalena, a 20 km de su desembocadura con el mar caribe, a la altura de Barranquilla y el municipio Sitionuevo.
Aunque esperaban que el puente aumentara el turismo y la activación económica del país, solo ha traído pérdidas económicas, denuncias, demandas, robos y malestar en los ciudadanos.
En los últimos meses la comunidad ha denunciado gran cantidad de robos en el puente, donde asechan los indigentes y se han alejado los turistas que prefieren evitar el paso por este lugar ante la falta de iluminación.
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Invías explicó que desde la inauguración se han robado cables y han invertido más de 900 millones de pesos en la reparación. Todos los días se roban los cables instalados al interior de los separadores laterales de concreto, las cubiertas de las cajas donde están los cables, las láminas de acero y las bombillas de la estructura.
El veedor del proyecto, Wilson Mancilla denunció que después de un recorrido en la infraestructura, cerca del 70% del puente presenta señales de óxido, vandalismo y objetos rotos. Pese a que inicialmente se esperaba que la obra durara 100 años, “difícilmente llegará a ese tiempo”.
De acuerdo con la Policía Metropolitana, en el puente había 133 lámparas instaladas y ya fueron robadas 20, por ende, Invías instalará cámaras de alta seguridad para tenerlas conectadas directamente con el Centro de Control de la Policía para controlar la seguridad de la estructura.
En el marco de un plan de seguridad para la zona, tienen dispuesto un CAI móvil, cuatro motos de reacción, dos puestos fijos en turismo y puestos de control fijos.