Mucho hemos escuchado hablar sobre la palabra coaching y cómo esta está asociada a profesionales que acompañan a importantes ejecutivos de diferentes sectores, deportistas de disciplinas individuales y colectivas, etc. Vemos como en deportes como el béisbol, existen los coaches de primera y tercera base respectivamente, los cuales “ayudan” a los corredores de turno a lograr avanzar por cada una de las almohadillas. Vemos a famosos tenistas como Alcaraz, Djocovick y demás que en sus partidos tienen a sus coaches sentados en las gradas dándoles las indicaciones requeridas para lograr sus objetivos. Presidentes de empresas, grandes personajes de la farándula, e inclusive, reconocidos líderes y expertos en hablar en público, la gran mayoría, tienen un coach contratado.
¿Cuál es el origen de la palabra coaching? Se dice que desde los años 1500, la palabra COACH describía a un vehículo tirado por caballos que llevaba a las personas desde donde estaban hasta donde querían llegar. Algunos escritores han sugerido también una descripción similar en el atletismo antiguo, donde los entrenadores o coaches ayudaban a los atletas talentosos a aumentar sus competencias y a ayudarlos a lograr la meta de ganar una medalla en los Juegos Olímpicos.
Independientemente de su origen, la palabra COACH se popularizó y se convirtió en aquella persona que ayuda a los atletas a moverse de un lugar a otro. Con el tiempo, la palabra se asoció con músicos, conferencistas públicos y actores, quienes confiaron en los coaches para mejorar sus habilidades, sobrellevar obstáculos, permanecer enfocados y llegar adonde ellos querían estar.
Por lo tanto, el COACHING es una disciplina profesional en la cual los coaches ayudan a sus clientes (coachees) a ir de donde están, adonde quieren llegar y después, a navegar a través de los obstáculos, los desafíos y las oportunidades que se presentan en el camino. Es una conversación que te hace reflexionar y te empodera a través de las respuestas que necesitas para maximizar las oportunidades y crecer para convertirte en una mejor versión de ti mismo. Es un proceso de pensamiento reflexivo y creativo que te inspira para maximizar tu potencial personal y profesional; cuando decimos que inspira nos referimos a que la persona es movida a la acción, a menudo, esa inspiración gira en torno a salir de su zona de confort para llegar a niveles en los cuales no había estado anteriormente. El coaching no se enfoca nunca en hechos pasados, se enfoca en el presente y en el futuro, está muy orientado en ver hacia adelante.
El coaching ayuda a las personas a ser más productivas, a ser más intencionales sobre sus propios procesos y sistemas para descubrir qué es lo que lo está obstaculizando. Un coaching exitoso necesita de un coach efectivo, se necesita alguien capacitado en las habilidades únicas y profesionales del coaching, a alguien que esté enfocado en la visión del cliente y que en realidad sea capaz de ser un catalizador de su crecimiento, porque ese crecimiento producto del coaching, es un acelerador de resultados. En el coaching, el coach nunca le dice a su cliente (coachee) lo que este debe hacer, sino que a través de un proceso reflexivo y de interiorización, permite encontrar respuestas. El coaching no debe confundirse ni con la consejería, ni con la mentoría y consultoría, en el coaching el cliente es responsable de los resultados, el cliente es el que hace la tarea, por su parte, el coach hace el trabajo solo durante la sesión de coaching y, debe ayudar a su cliente lo más seguido posible a recordar su visión y sus valores para llevarlo a un nivel más trascendental.
El coach debe asegurarse de que sus preguntas al cliente se enfoquen hacia el futuro, por ejemplo: ¿Qué estás dispuesto a hacer diferente? ¿Qué es lo que quieres? ¿Cuándo podrías hacerlo? ¿Cuál es el mensaje para ti? ¿Qué estás aprendiendo a medida que avanzas? ¿Qué lección vas a llevarte de esto? ¿Cómo quieres aplicar esa lección para acercarte más a tu visión? Todas estas preguntas llevan al coach a escuchar mejor, a escuchar con empatía, consciente y activamente. Ninguna sesión de coaching estará completa sin el compromiso por parte del cliente de tomar acción o acciones, en función de la conversación que sostuvieron.
Los clientes llegan a los coaches buscando cambios en las áreas de sus vidas que son importantes, y todo cambio implica un movimiento. Solo con un plan de acción definido, el cliente se comprometerá a actuar en dirección hacia sus objetivos y por supuesto, ¡el coach celebrará esos logros!
En Banco Serfinanza, dentro del Programa de Liderazgo Misión Ser, se han desarrollado diferentes espacios para entrenar al equipo de líderes en tres frentes: Dirección, Movilización y Logro, dónde el coaching es un capítulo clave para alcanzar los objetivos propuestos.
¡El COACHING es un estilo de vida!
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