Confidenciales 360
Todos los pronósticos daban por muerta la candidatura de Humberto de la Calle, él lo supo y por eso intentó luego del 11 de marzo una coalición con Sergio Fajardo, pero infortunio suyo y de sus seguidores, esa coalición fue torpeada por presidente del partido Liberal, César Gaviria. Ayer mientras aceptaba su derrota, vimos a un De la Calle bastante dolido y molesto; no era para más, pues, aunque sus seguidores fueron fuertes hasta el último día y le agradecieron su compromiso con el proceso de paz, el obtener sólo el 2% en cualquier tipo de elección genera una gran decepción. De la Calle aún no ha podido quitarse la cruz del proceso de paz y el mensaje que recibió ayer por parte de los colombianos, es que la gran mayoría siguen sin estar de acuerdo con lo que negoceó en La Habana.
La candidatura de Humberto de la Calle fue inviable desde el primer momento. Siempre estuvo muy mal rodeado, su fórmula presidencial no fue una gran opción y el estar cerca de personas como Juan Fernando Cristo, pues terminan generando toda la resistencia del mundo. Asimismo, el estar frenteando esa candidatura solo, ya que su partido lo abandonó (la mitad se fue para donde Vargas Lleras y la otra mitad para donde Duque), contribuyeron al fracaso electoral más grande en la historia del partido Liberal, la cual ya comienza a pasarle una gran factura al expresidente César Gaviria, pues son muchos los que consideran que fue él quien impidió la alianza entre Fajardo y el liberalismo, que hoy muy seguramente le habrían permitido a Fajardo pasar a segunda vuelta.
Habrá que esperar a ver si la historia se reivindicará con De la Calle, porque aunque muchos quieran o no reconocerlo, el caldense desempeñó una labor importante y no merecía una despedida tan fría y gris como la que le obtuvo ayer con su votación.