El mural que no duró ni 24 horas

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El artista Pipe Yanguas obsequió un mural a la ciudad de Cali, el cual fue inaugurado el 8 de marzo, mismo día que fue vandalizado


Por: Redacción 360

Por medio de un video titulado ‘The short life of a mural I donated to my hometown Cali’ (La corta vida de un mural que doné a mi Cali natal), el artista Pipe Yanguas relató la historia de su mural ‘Cali Florece’, inspirado en la canción, ‘Las caleñas son como las flores’. Dicho mural fue entregado en el marco de la Conmemoración Internacional del Día de la Mujer.

En el video, el artista relata como fue el proceso de hacer dicho mural, explicando que primero pidió permiso a los dueños del edificio ubicado en la Calle 10 con Carrera 1 en el sector del Bulevar del Río, en el centro de la capital del Valle. El artista también señaló que tuvo que cumplir con una documentación que la Secretaría de Cultura le ayudó a gestionar para así tener luz verde en la realización de este proyecto.

Pipe Yanguas agregó también que luego de programar su viaje a Cali, empezó a pintar el 28 de febrero de 2022 y lo hizo de día y de noche, logrando terminarlo en siete días. El octavo día junto con los bailarines Camilo Zamora y Giselle Rengifo realizó la fotografía que hace parte de su proyecto ‘Together we are infinite’. Yanguas explicó que su último día en el país fue el mismo en el cual se llevó a cabo la inauguración oficial de este proyecto.

La inauguración se dio de la mano de la secretaría de cultura el 8 de marzo. El autor vio esta como una fecha propicia teniendo en cuenta la inspiración que tuvo para el mural, al irse del país Yanguas señaló que al irse del país se fue con mucha alegría, pero cuando llegó a su residencia encontró un video en el cual su mural había sido vandalizado, en los mensajes con aerosol se leía «las mujeres pintamos», «esto no nos representa» y «muerte al macho».

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El artista señaló que probablemente las mujeres creyeron que el mural fue encargado a un hombre para rendirles homenaje, pero recalcó que esto no fue el caso. Además recalcó que esta es la pieza más grande que ha pintado, la cual demandó una inversión no solo monetaria sino que también de energía y tiempo.

«Me considero una persona generosa. Que valora y respeta a las mujeres. Me duele saber que un regalo de todo corazón con el fin de acercar a la gente, la haya dividido. Me alivia saber que pude hacer la fotografía llamada ‘la vida es una danza’, cuyas ventas benefician a una fundación local llamada ‘Tecnocentro cultural somos pacífico’. Todo mi trabajo quiere evocar sonrisas en el corazón de las personas».

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