La cabeza visible del grupo es Beatriz Dávila de Santo Domingo, viuda del empresario Julio Mario Santo Domingo, quien ha combinado su actividad empresarial con labores filantrópicas a lo largo de su trayectoria.
La familia Santo Domingo: liderazgo, riqueza y expansión empresarial
A sus 84 años, Beatriz Dávila es la única mujer en el listado de los millonarios del país y continúa desempeñando un papel clave en la administración del conglomerado familiar. Maneja aproximadamente un tercio del holding Santo Domingo y posee una participación en la cervecera Anheuser-Busch InBev, compañía que representa el principal activo financiero del grupo.
La empresa, considerada la mayor productora de cerveza del mundo, es una de las bases de la riqueza de la familia.
Desde 2011, la gestión del imperio ha estado a cargo de Alejandro Santo Domingo, hijo de Beatriz y heredero directo de la visión empresarial de su padre. Con una fortuna personal estimada en 2.800 millones de dólares, el empresario de 46 años tomó las riendas del conglomerado tras el fallecimiento de Julio Mario Santo Domingo.
Su liderazgo ha permitido el fortalecimiento de múltiples negocios estratégicos, asegurando la expansión y diversificación de los activos familiares.
Uno de los sectores donde la familia ha consolidado su presencia es el retail de bajo costo. La cadena de supermercados D1, una de las apuestas más exitosas del holding, ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años. Solo en 2023, la empresa registró ventas por 17,39 billones de pesos, lo que representa un incremento del 24,8 % en comparación con el año anterior.
Actualmente, D1 cuenta con más de 2.400 tiendas en 520 municipios del país y sigue expandiéndose con un plan ambicioso que involucra 20 centros logísticos y una plantilla de aproximadamente 19.500 colaboradores en 28 departamentos.
La popularidad de la cadena de hard discount es evidente, con un estimado de 1,6 millones de clientes diarios en sus tiendas. A diferencia de otras compañías del mismo sector, como Justo & Bueno, que enfrentó una liquidación en 2022, D1 ha logrado un crecimiento sostenido gracias al respaldo financiero de la familia Santo Domingo.
La cadena fue fundada en 2009 por el empresario chileno Michel Olmi, y tras su consolidación en el mercado colombiano, el holding Santo Domingo adquirió el 60 % de la compañía en 2015. Desde entonces, se ha posicionado como el líder del sector de descuentos duros y un actor clave en la industria minorista.
El poderío económico de la familia no solo se refleja en Colombia, sino también a nivel global. En el ranking de las personas más ricas del mundo, la familia Santo Domingo se encuentra en la posición 156, un reflejo de su exitosa gestión y diversificación en sectores clave.
Con inversiones en diversas industrias, desde medios de comunicación hasta infraestructura, el grupo se ha mantenido a la vanguardia del desarrollo empresarial en el país y el mundo.
El futuro de la familia Santo Domingo parece seguir en ascenso, con una estrategia de negocios que se adapta a las tendencias globales y una sólida estructura que garantiza la continuidad de su legado empresarial. En un entorno económico desafiante, su capacidad de innovación y expansión la mantiene como una de las más influyentes dentro y fuera de Colombia.
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