La Semana de la Moda en Madrid, conocida como MOMAD 2025, inició con una sorpresa para el público europeo: por primera vez siete marcas bogotanas, provenientes de los sectores tradicionales de San Victorino y el Restrepo, se tomaron la pasarela para mostrar lo mejor del diseño colombiano. Este debut marca un paso clave en la internacionalización del sector textil nacional y pone a Bogotá en el mapa de la moda global.
Las marcas El Maletero, Seven 7, NK, KOTT RISK, OC59, With Love María y Santina Boots fueron seleccionadas para llevar a Madrid sus colecciones primavera–verano, en un escenario que se ha convertido en punto de encuentro para compradores, distribuidores y especialistas de todo el mundo. La feria, organizada por IFEMA, se extenderá hasta el 13 de septiembre.
Semana de la Moda como vitrina de la moda colombiana
El respaldo de la Cámara de Comercio de Bogotá fue decisivo en este proceso. A través del programa Colectivo Puente, la entidad acompañó a los diseñadores con procesos de curaduría, mentoría y capacitación, preparando a las empresas para competir en un espacio de alto nivel. El objetivo, según explicó el presidente ejecutivo de la Cámara, Ovidio Claros Polanco, es consolidar casos de éxito que escalen desde la fase creativa hasta convertirse en unidades productivas con alcance internacional.
La Semana de la Moda en Madrid no solo es un escaparate para la industria, sino un escenario estratégico para que marcas emergentes se den a conocer en Europa. MOMAD se realiza dos veces al año y está considerada como una de las ferias más influyentes del continente. En cada edición, reúne a cientos de propuestas que marcan tendencias y que suelen definir el rumbo del sector en las próximas temporadas.
En el caso de Bogotá, la apuesta estuvo concentrada en tres ejes centrales: moda sostenible, innovación digital e internacionalización de negocios. La sostenibilidad fue un elemento clave, pues cada marca mostró cómo está incorporando procesos responsables con el medioambiente, desde el uso de materiales reciclados hasta prácticas de producción ética.
El espacio denominado Stand Bogotá Fashion Week permitió agrupar a las siete empresas bajo una misma identidad: la de un talento local que no solo busca vender prendas, sino contar historias de resiliencia, tradición y creatividad.
Un antes y un después para el diseño colombiano
La presencia de estas compañías en la Semana de la Moda en Madrid significa más que un logro puntual. Representa un cambio de narrativa: Bogotá deja de ser vista únicamente como un mercado interno para convertirse en semillero de propuestas competitivas frente a marcas internacionales.
Este movimiento también refleja una estrategia de largo plazo. Con el programa Puente, la Cámara de Comercio ha construido un modelo de aceleración empresarial que incluye asesoría en negocios, conexiones con compradores internacionales y fortalecimiento de las habilidades creativas. Todo esto con el fin de que el talento colombiano no se quede en lo local, sino que trascienda fronteras.
MOMAD 2025, además, sirve como termómetro para medir cómo el público europeo recibe las propuestas latinoamericanas. La feria abre posibilidades de negocios inmediatos, pero también de colaboraciones a futuro con marcas consolidadas en el continente.
El debut de estas siete marcas bogotanas demuestra que la moda colombiana tiene potencial no solo para inspirar con diseño, sino también para generar valor agregado con sostenibilidad, digitalización e innovación. La Semana de la Moda en Madrid se convierte así en un escenario de validación y en la puerta de entrada para que Colombia siga fortaleciendo su identidad en la industria global.