«Este es un sector que ha recibido mayor atención en la producción de contenidos para plataformas internacionales”: Ricardo Cantor

La gestión de Cantor y su influencia en la programación, formación y participación comunitaria son claves del éxito en el desarrollo del sector audiovisual

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En el corazón cultural de la ciudad, Ricardo Cantor destaca, gerente de Artes Audiovisuales en Idartes, con una visión vanguardista y compromiso con la promoción artística y la producción de contenidos. 360 Revista analiza su gestión y su impacto en la programación, formación y participación comunitaria.

Introducción Cantor: La Cinemateca de Bogotá no es una entidad independiente autónoma; somos la gerencia de Artes Audiovisuales del Instituto Distrital de las Artes (Idartes), pertenecemos al sector de cultura, recreación y deporte del Gobierno de Bogotá. Como gerentes de Artes Audiovisuales, gestionamos este centro cultural: la Cinemateca de Bogotá.

360 Revista: ¿Cuál es el balance actual del centro cultural de las Artes Audiovisuales?

Ricardo Cantor: Es muy positivo; hemos logrado abarcar y dedicarnos al audiovisual con una mirada amplia. Mantenemos el cine tradicional como pilar fundamental, pero también trabajamos en líneas como el audiovisual expandido y los nuevos medios, a través del Media Lab y nuestro ecosistema de creación y experimentación. Además, continuamos con procesos de preservación, acceso y consulta especializada a través de nuestra línea de archivo y memoria.

Hemos llevado a cabo procesos de formación, diseñados especialmente para críticos y para la formación de públicos, con el objetivo de atraer nuevas audiencias. También gestionamos el conocimiento mediante publicaciones y toda la gestión de la programación a través de nuestra línea de trabajo relacionada con procesos de programación y curaduría en salas de cine y espacios expositivos.

Este es un centro cultural dinámico, visitado por alrededor de 1800 personas cada fin de semana y con una asistencia de 1500 a 2000 personas de martes a viernes. En total, recibimos un promedio de 2500 a 3500 personas semanalmente, alrededor de 11000 personas mensuales en salas de cine. Además, tenemos asistentes en espacios expositivos, comerciales, talleres y ofertas de formación

360 Revista: Hablando del sector audiovisual, ¿cómo ha evolucionado no solo en la capital, sino en el país?

Ricardo Cantor: Ha experimentado un crecimiento en programas de formación y en la realización de la producción. Esto ha generado una base de profesionales buscando inserción en proyectos propios o trabajando en empresas productoras, salas de cine, espacios de circulación, investigación, preservación y gestión de archivo.

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A pesar de la reducción de acciones debido a las leyes de cine 814 y 1556 en 2020 por la pandemia, los años 2021, 2022 y 2023 han retomado ritmos anteriores a la pandemia, reactivando proyectos audiovisuales. No obstante, persisten limitados espacios de circulación para el cine colombiano, especialmente en salas independientes, que son clave para la cinemateca y el cine nacional. Observamos un circuito comercial cerrado al contenido nacional.

El circuito nacional depende del recaudo y taquilla, mientras que los centros culturales y las salas independientes buscan democratización, acceso a la cultura y diversidad en la oferta de contenidos. Este sector ha recibido mayor atención en la producción para plataformas internacionales, lo cual dinamiza la empleabilidad.

Un efecto crucial de la ley 1556 y proyectos internacionales es la especialización de profesionales, mejorando la calidad del producto nacional. Sin embargo, persisten necesidades de apoyo y financiación, especialmente en sostenimiento y circulación del cine colombiano

360 Revista: Usted lleva en este cargo más de 2 años y cuando usted recibió este cargo el mundo estaba pasando por una crisis como lo fue la pandemia. ¿Cuáles fueron los mayores retos que se tuvieron que enfrentar y se siguen teniendo para volver a llegar a una “normalidad”?

Ricardo Cantor: Uno de los mayores retos fue el cierre de todas las salas de cine y espacios de encuentro social. La cinemateca ofreció una programación virtual que se mantuvo durante la pandemia hasta la reapertura total.

Respaldar económicamente al sector se llevó a cabo mediante líneas de fomento y creación. Además, continuamos procesos de formación con un enfoque territorial a través de cursos virtuales. Estos permitieron que la comunidad de la cinemateca rodante participara en procesos creativos desde sus hogares, manteniendo viva la estrategia territorial.

Otro desafío fue elaborar un protocolo de bioseguridad para reanudar las filmaciones en espacios públicos como comisión fílmica, siendo pioneros en su implementación, permitiendo una pronta reactivación.

360 Revista: La tecnología hoy juega un papel fundamental y se ha innovado con las plataformas streaming. ¿La Cinemateca ha sentido algún impacto fuerte a raíz de las diferentes plataformas que hoy existen?

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Ricardo Cantor: Como cinemateca, no. Seguimos siendo una apuesta de contenido en una pluralidad de miradas y diversidad de contenidos. Aunque las plataformas han ampliado el acceso a obras audiovisuales, la experiencia de la sala de cine sigue siendo valorada por diversos públicos. La asistencia al centro cultural se ha mantenido de manera positiva.

Producción de contenidos y proyección de las artes audiovisuales

360 Revista: ¿Qué proyectos se vienen a futuro para el centro cultural de las Artes Audiovisuales?

Ricardo Cantor:  Con un cambio de administración, esperamos mantener y ampliar la calidad en la oferta cultural. En el caso de la cinemateca de Bogotá, apostamos por mantener redes con festivales, distribuidores y embajadas. Fortaleceremos nuestros ciclos propios como el Ciclo Rosa, la Muestra Afro, Nuevos Horizontes para la Paz, el Ciclo POP, y la programación en nuevos medios y audiovisual expandido alrededor del Media Lab.

Continuaremos fortaleciendo la programación con enfoque diferencial poblacional, orientada a niños, familias, personas mayores y aquellas con discapacidades auditivas, visuales y cognitivas. Mantendremos la línea de Archivo Vivo, las retrospectivas y rutas para recorrer patrimonios audiovisuales del mundo.

360 Revista: ¿Cuál cree usted que es el impacto que tienen las artes audiovisuales en el desarrollo del país a nivel social y cultural?

Ricardo Cantor: Las artes audiovisuales nos permiten ser representados y generar procesos de autorrepresentación. A través de imágenes en movimiento y bandas sonoras, generamos interpretaciones y reflexiones sobre nuestros contextos, realidades, geografías y poblaciones. Estas obras no solo generan memoria a través de documentos audiovisuales, sino también actúan como vehículos y catalizadores de debates, diálogos y reflexiones sociales en torno a nuestra identidad como país.

Este contenido hace parte de la octava edición de Revista 360 que cuenta con la participación de más de 70 invitados de todos los principales sectores económicos, productivos y políticos de Colombia. Ministros, líderes gremiales, líderes en áreas de la construcción, sectores bancarios, logística e infraestructura, telecomunicaciones, gobernantes regionales, analistas, economistas, entre otros.

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