Estoy convencido que fue correcto aumentar el IVA: Mauricio Cárdenas

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El ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, explicó que si no se hacía la reforma tributaria se hubieran visto seriamente afectados los programas sociales, de los cuales se ven beneficiados millones de colombianos que han salido de la pobreza.


Revista 360: ¿Cómo cierra la economía en Colombia este año desde su punto de vista?

Mauricio Cárdenas: Cierra mejor de lo que empezó porque el crecimiento del primer semestre fue muy malo y las cosas han ido mejorando. Para este segundo semestre esperamos unas cifras más altas del crecimiento del PIB, de manera que podamos terminar con un crecimiento no muy lejano al 2%, mientras que el primer semestre fue apenas de 1.2%.

Termina también con un mejor comportamiento de la inflación. Recordemos que estaba bastante alta a finales del año pasado, al cierre de este año va a estar por debajo del 4%, esto es un buen dato y termina también con un mejor panorama en materia de ingresos externos porque las exportaciones han crecido, entre otras cosas el precio del petróleo ha mejorado por lo que en el frente externo las condiciones son más favorables. Termina también con una mejor cifra en materia del déficit externo en la cuenta corriente de la balanza de pagos que el año pasado fue 4.4% del PIB, este año va a ser algo así como 3.7% de dicho PIB, lo que quiere decir que se cierra ese déficit externo y eso facilita también el manejo macroeconómico.

360: Hay una importante mayoría en el país que coincide en que este año fue muy duro económicamente hablando, ¿por qué cree usted que se dice eso?

M.C.: Porque fue un año en el que seguimos en ajuste, entre otras cosas porque fue el año en el que se sintió el efecto del aumento del IVA. También porque fue cuando la inflación empezó alta, las tasas de interés estaban muy altas al comienzo aunque ha venido bajando a lo largo del año. Es un año en el que hemos tenido que terminar de hacer un ajuste económico para acomodarnos a la caída del precio del petróleo, y pienso que este y el año pasado han sido los más difíciles de ese proceso de ajuste, porque es cuando hemos sentido más fuertemente el haber perdido prácticamente la totalidad de los ingresos petroleros que recibía el gobierno, eso ha significado que hemos tenido que reducir gastos y subir otros impuestos para poder estabilizar la economía.

Esto ha resentido el aparato productivo aunque hubiera sido mucho peor no hacer nada sin ajustarnos o acomodarnos a esa nueva realidad. Si no hubiéramos subido los impuestos en la parte del IVA hubiéramos tenido que recortar muy fuertemente los programas sociales, y si no hacemos los recortes del gasto hubiéramos tenido una explosión del déficit fiscal que nos habría dado una calificación triple B, en la cual está Colombia, y que ha sido fundamental para acceder a un financiamiento barato y de tener buenas condiciones para la inversión. Habría sido mucho peor no hacer lo que se hizo, pero lo que se llevó a cabo no deja de ser duro y complejo

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360: ¿Qué le dice a quienes opinan que no fue el mejor momento para hacer la reforma tributaria?

M.C.: Al mismo tiempo que subimos el IVA, fue necesario bajar algunos impuestos que pagaban las empresas, en particular se redujo el impuesto a la riqueza. Este año los empresarios están pagando menos impuestos de riqueza que el año pasado, y también se hizo un importante cambio: se sustituyó el CREE por el impuesto de renta, y este es un elemento que también beneficia a las empresas porque generan menos ingresos fiscales.

Tuvimos que hacer algo muy complejo, subir impuestos como el IVA, bajar impuestos a los empresarios para que pudieran hacer más inversiones y tener mejores condiciones, y al mismo tiempo recortar el gasto pero no sacrificando los programas sociales más importantes. Cuadrar esa ecuación no era nada fácil. Estoy convencido de que lo que se hizo fue lo correcto porque si no se hubiera incrementado el IVA, los recortes sociales hubieran sido dolorosos para muchos colombianos, muchos de los programas que han ayudado a millones de colombianos a salir de la pobreza se habrían tenido que reversar. La fórmula era la correcta y así lo reconocen los analistas más objetivos e independientes que evalúan la economía colombiana.

360: Algunas personas desconocen el tema del petróleo, no saben cómo influye la venta de carbón, el asunto de los bonos… ¿Cómo sigue afectando la baja en los precios del petróleo? ¿Cómo está Colombia frente a las calificadoras?

M.C.: A nosotros nos miden todos los días con los precios y las tasas que se cobran por los bonos que emite la República de Colombia. Lo que hemos logrado con este ajuste del 2016 y 2017 es una reducción significativa del costo al financiamiento para Colombia, tanto en pesos en el mercado interno como en dólares en el mercado externo. Los inversionistas hoy tratan a Colombia con mayor favorabilidad de lo que la trataban hace dos años en términos de las tasas que cobran por nuestros papeles, de manera que esa medición, que es una prueba ácida, todos los días nos indica que hemos hecho las cosas correctas porque hoy estamos pagando por un papel a diez años en pesos a una tasa del 6.5%, y a comienzos del año pasado esa tasa llegó a estar cercana al 9%.

Es decir, el costo del crédito para el gobierno y para toda la economía ha bajado considerablemente, y lo mismo podríamos decir de los bonos en dólares. Todo esto se resume en que Colombia ha logrado la calificación triple B, que es la que obtuvo en 2013 cuando el petróleo estaba por encima de 100 dólares por barril, pero por un certero manejo económico hemos logrado mantener la misma calificación que teníamos cuando el petróleo estaba en las nubes, hoy su precio oscila entre los 53 y 55 dólares por barril, y a pesar de eso hemos mantenido la calificación triple B, es decir, la misma confianza, los inversionistas evalúan a Colombia de la misma manera que lo hacían en 2013 cuando teníamos el doble de exportaciones, debido a que la caída del petróleo hizo que las exportaciones de Colombia se vinieran a la mitad, y eso no lo asimila cualquier economía de una forma sencilla. El país lo ha hecho sin experimentar una crisis, traumatismo o recesión, y esto resulta ya de por sí un logro muy importante.

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360: Usted mencionaba que los empresarios pagan menos impuestos, pero tenemos aún quejas y  unas miradas comparativas hacia Panamá, incluso, hacia Estados Unidos si se aprueba la reforma tributaria que propone el presidente Donald Trump donde se volverían otros países más atractivos para las empresas. ¿Qué le dice usted a los empresarios?

M.C.: La tasa del impuesto de renta va a bajar a 33% en el 2019, eso es lo que está proyectado del asunto tributario. Bajar la tasa más allá del 33%, es un tema que tendrá que evaluarse sobre la base de las metas fiscales de Colombia.

La pregunta es si se tendrá que bajar más para poder ser más competitivos, sobre todo, si lo que ocurre en Estados Unidos en el gobierno de Trump realmente tiene efecto, es decir, que bajen los impuestos en ese país, pero por el momento yo considero que con el estatuto tributario que queda en Colombia lo pueden manejar las coyunturas fiscales del país; no me aventuraría a unas reducciones adicionales que puedan generar unos faltantes de ingresos fiscales y que al mismo tiempo exijan unos fuertes recortes en el gasto, porque este gasto público no es derrochador, superfluo como piensan muchas personas; es un gasto que está orientado a programas muy sensibles para la población.

360: Existen algunos sectores que hablan de la necesidad de una nueva reforma tributaria, además de hacer la reforma pensional. ¿Qué nos puede decir acerca de esto?

M.C.: La prioridad va a tener que estar sobre la reforma pensional. Hay que buscar cómo  evitar que siga creciendo el gasto público en pensiones. Este es uno de los temas prioritarios, hay buenos diagnósticos y hacia allí yo orientaría todas las recomendaciones.

 

 

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