Sin ser confirmada aún por parte de la Alcaldía de Medellín ni por la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano (Fnpi), el Festival y Premio Gabo 2022 se realizará en la semana del 22 de octubre en el Gimnasio Moderno, en Bogotá.
Por: Redacción 360 Radio
Terminaría así una evento nacional e internacional que comenzó en Medellín en octubre de 2014 y se tomó como uno de los encuentros más importantes, después de la Fiesta del Libro. En el festival Gabo, visitantes, docentes y estudiantes tenían la posibilidad de estar junto a grandes personalidades del periodismo iberoamericano, compartiendo sus experiencias y conocimientos, en una cita cultural de primera categoría, pues no hay evento periodístico en español que se le parezca.
360 Radio publicó el 29 de julio una nota en la que se preguntaba a Jaime Abello Banfi, director de la Fnpi, si era cierto el traslado, cuándo iban a avisar y las causas de éste. Dudas que hasta el momento no se han respondido, dejando en visto los mensajes en WhatsApp, pese a que él mismo mostró disponibilidad para aclarar las dudas.
Por parte de la alcaldía, el encargado de manejar la cuenta de WhatsApp de la oficina de comunicaciones (Prensa Alcaldía Medellín) fueron más sarcásticos:
“Wilmar, lo que preguntas son supuestos. La Alcaldía no tiene pronunciamiento sobre esto”, respondieron en el chat.
Al indagar, entonces, dónde sería el certamen y si esa es la respuesta oficial, escribieron:
“Sí, es la respuesta oficial. Estas preguntas debes hacerlas directamente a la organización del evento”.
Ante la superficialidad, se le pidió que a este periodista le informara la alcaldía dónde se realizaría el festival y premio Gabo, respondiendo lo siguiente:
“La alcaldía espera que en Medellín”.
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¿Qué pasó?
Las razones de la pérdida para la ciudad apuntan, de acuerdo con algunas fuentes consultadas, a la incomodidad que grandes patrocinadores, como Bancolombia o Sura, tienen con la administración actual, molestias de las que se hablaban desde el año pasado, cuando por la pandemia el evento era virtual.
Como si fuera poco, varios medios locales han desnudado problemas en el campo de la cultura, desde abusos a trabajadores en las sucursales del Sistema de Bibliotecas de la BPP, hasta recortes de presupuesto en actividades tan relevantes como Eventos del Libro, donde, de acuerdo con El Colombiano, su presupuesto se ha visto reducido:
“En otro hilo de Twitter —esta vez del 30 de julio—, el concejal Duque lanzó una crítica a la disminución del presupuesto destinado a la Fiesta del Libro. Da a conocer los datos obtenidos tras un derecho de petición enviado a la Secretaría de Cultura. Entre sus hallazgos hay dos sobresalientes: la disminución del presupuesto para los Eventos del Libro –en 2019 $ 8.363.558.600, en 2020 $3.841.719.985, en 2021 $6.000.751.307–. La cifra para el 2022, le respondió la secretaría a Duque, todavía se “encuentra en elaboración”.
Algunos hechos ratifican el cuestionamiento: la disminución de la cantidad e impacto de las actividades de la Fiesta, el recorte de los honorarios a los invitados y moderadores, la tardanza en la ejecución de actividades. Por ejemplo, Días del Libro se realizaba en mayo y en 2022 inició a principios de julio. Evidentemente la Fiesta del Libro de 2021 fue más pequeña, no se hizo en Carabobo, que ya era tradición”, publicó el diario.
Aunque traten desde Fnpi y alcaldía de no ventilar el hecho, lo cierto es que los invitados saben que se verán a finales de octubre en Bogotá y desde el Gimnasio Moderno están esperando la programación oficial para hacerla pública.
Es una lástima perder un evento de esta categoría, máxime cuando todo indica que son por razones extraculturales y más bien predominaron las pugnas entre la clase económica y política de la ciudad.
Los alcaldes pasan y terminan sus periodos, las empresas quedan y siguen sumando ganancias, pero al final -como el buen coronel ninguneado por las marañas del poder y la burocracia ingeniado por Gabriel García Márquez- es el público, el ciudadano de a pie, el amante de la cultura, el principal afectado y a quien siempre mandan a comer de lo mismo del militar cuando su mujer lo sacudió por el cuello de la franela.