El gobierno de Israel había advertido que si los contagios por Covid-19, esta vez por causa de la variante Delta, no disminuían, se reimpondría el uso obligatorio de tapabocas.
Por: Redacción 360 Radio
Después de que se presentaran nuevos brotes en dos ciudades y un incremento progresivo de los contagios en todo el país, el nuevo jefe de gobierno, el primer ministro israelí Naftali Bennett, pidió a los ciudadanos portar nuevamente el tapabocas en interiores.
Aún así los contagios no dejan de aumentar ante la presencia de la nueva variante Delta y el uso de la mascarilla pasó de ser un recomendación a convertir una vez más en una obligación para los israelíes, que hace casi dos meses experimentaban un deceso de los contagios y una flexibilización de casi todas las restricciones gracias a la vacunación.
De esta obligatoriedad continúan exceptuados los menores de siete años, personas con discapacidad, quien se encuentre a solas en un espacio, empleados que trabajen en una misma sala y las personas que estén realizando actividades deportivas.
«Esta mutación contagia mucho más rápido que el virus original. Otra característica de Delta es que también contagia a personas vacunadas. La vacuna tiene aún un efecto significativo e importante, pero pese a ello uno puede vacunarse y contagiarse», explicó el primer ministro.
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Además de esto, el mandatario pidió no viajar al extranjero si no es completamente necesario e invitó a que los niños mayores de 12 años también acudan a vacunarse, ya que muchos brotes se han dado en colegios. También sugirió extender la reapertura de las fronteras hasta el 1 de agosto, pues se preveía que se permitía la entrada de turistas desde el próximo 1 de julio.
Aunque las autoridades sanitarias no consideran que Israel esté enfrentando un cuarto pico de contagios, apoyan la medida impuesta por Bennett.