La región del Eje Cafetero, compuesta por los departamentos de Caldas, Risaralda y Quindío, registra importantes avances en materia de infraestructura vial, en el marco del programa de autopistas de cuarta generación (4G) y los nuevos proyectos de quinta generación (5G) impulsados por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).
Se estima que la inversión en los corredores viales 4G de esta zona suma aproximadamente $4,9 billones de pesos, lo que representa 7,47 % del total nacional para este tipo de obras.
Avances de los proyectos 4G y 5G en el Eje Cafetero
Según datos de la ANI, el programa nacional de vías 4G alcanzó a corte de mayo de 2025 un avance promedio de construcción del 91,52 %, luego de un Capex cercano a los $65,6 billones.

Dentro de ese contexto, la región del Eje Cafetero concentra una parte significativa de las inversiones en estos corredores: los $4,9 billones mencionados corresponden únicamente a los proyectos regionales vinculados a la 4G.
El detalle por proyecto revela que la obra principal es la Autopista Conexión Pacífico 3, que con una inversión de $2,8 billones es la de mayor monto en la región. Le siguen tres proyectos con inversiones de aproximadamente $0,7 billones cada uno: la Autopista Conexión Pacífico 2, la IP Cambao‑Manizales y la IP Girardot‑Cajamarca.
La Autopista Conexión Pacífico 3 conecta puntos estratégicos como La Virginia (Risaralda) con La Pintada (Antioquia) y cuenta con una longitud de 146 km. El proyecto ya registra un avance del 100 % en su ejecución de construcción.
- La Autopista Conexión Pacífico 2 es esencial para unir la región del Eje Cafetero con municipios de Antioquia como Bolombolo y Primavera, lo que facilita la movilidad entre el centro-occidente y el Pacífico.
- La IP Cambao-Manizales tiene como objetivo mejorar la conexión de Caldas con otros municipios clave como Armero, Mariquita y Honda, facilitando el tránsito hacia el centro del país.
- La IP Girardot-Cajamarca vincula también la región cafetera con corredores hacia el centro y norte del país, lo cual fortalece la cadena logística de producción, por ejemplo, del café y distribución regional.
La inversión del 7,47 % nacional que representa el Eje Cafetero en los proyectos 4G no solo se traduce en kilómetros de vía, sino también en impacto socioeconómico. Según análisis regionales, estas obras están conectadas directamente con la producción, comercialización y el turismo en la zona cafetera.
Por ejemplo, mejores vías de transporte reducen tiempos de traslado, costos logísticos, y permiten que los productos agrícolas de la región lleguen con mayor eficiencia a puertos o centros de consumo. Al mismo tiempo, mejor infraestructura facilita el turismo, uno de los pilares económicos del Eje Cafetero.
Más allá de las 4G, la ANI ya tiene en marcha proyectos bajo la generación 5G. En la región, destaca la IP Conexión Centro, con un capex preliminar de $1,9 billones, que busca intervenir los corredores La Paila-Calarcá y Armenia-Manizales, con estándares de sostenibilidad más altos.
Este enfoque 5G añade componentes de operación y mantenimiento a largo plazo, así como mejores estándares ambientales y de calidad de servicio.
Aunque el foco ha sido principalmente vial, la región también mantiene expectativas en materia ferroviaria. En particular, desde Caldas se observa con interés la posible adjudicación del tramo La Dorada‑Chiriguaná, proyecto estratégico para conectar carga desde el centro hacia el norte del país.
Actualmente, solo cerca del 29 % de la red férrea en Colombia está en operación, movilizando apenas el 11 % de la carga nacional.
La mejora de la red férrea complementaría la inversión vial, ofreciendo una alternativa de transporte de mercancías más eficiente y menos costosa para la región.
Pese al elevado grado de avance nacional de los 4G, existen aún retos por afrontar:
- Completar las obras complementarias, señalización, intersecciones urbanas y conexión con las vías secundarias.
- Garantizar que el tránsito de las obras hacia la fase de operación-mantenimiento se haga sin contratiempos.
- Hay que asegurar que los beneficios de la infraestructura se transfieran efectivamente al tejido productivo y social de los departamentos de Caldas, Risaralda y Quindío.
- Desarrollar los proyectos 5G y ferroviarios con criterios de sostenibilidad, eficiencia y transparencia.
La infraestructura vial del Eje Cafetero está viviendo un momento de transformación importante. Con una inversión focalizada de casi 5 billones de pesos y corredores clave ya en niveles finales de ejecución, la región se prepara para mejorar su conectividad interna y externa. Esto tiene implicaciones directas para la competitividad, la producción agrícola (y particularmente el café) y el turismo.
De igual forma, el avance hacia la era 5G y la expectativa de mejoras férreas abren un horizonte alentador. Para que este impulso se traduzca en resultados concretos, será esencial que avancen con rigurosidad los cronogramas, que se vincule el desarrollo vial con el desarrollo económico regional y que la comunidad pueda ver y sentir los beneficios en su día a día.