La inmensa responsabilidad de gobernar

Gobernar no es un ejercicio fácil; mucho menos se parece a hacer campaña o hacer oposición. Gobernar bien es un reto que pocos saben hacer.

Compartir

Los modelos de gobernanza que cada país escoge, de una u otra forma, sean democracias muy jóvenes u otros que han heredado a través de los siglos, terminan asemejándose al final en la misma línea, que es gobernar.

Gobernar sin importar si eres un monarca, si eres un líder parlamentario, si eres un presidente o incluso si eres un dictador. Todos están destinados a gobernar.

Y de gobernar se desprenden tres ramas concisas, claras y que no se prestan para la ambigüedad: o se gobierna muy bien , o se gobierna de manera mediocre, o es muy malo gobernando.

Lo cierto es que en los casos en donde se observa en los últimos años mayor descontento, cuestionamientos, retrasos, conmociones interiores, es en los modelos democráticos.

Pareciera que la democracia cada vez ha perdido mucho más ese prestigio y quizás su mayor virtud, que era la libertad y la capacidad de deliberación y de igualdad a la hora de ejercer el derecho al voto.

Las personas están tendiendo más a evaluar los resultados de los gobiernos, a querer que los gobiernos hagan las cosas de manera impecable, de manera excelente, con resultados y con desarrollo para su gente.

Por eso es que hoy tanto se habla de cómo los gobiernos autocráticos, monárquicos, los principados, eh, pues tienen tan buenos resultados en su mayoría.

Gozan de mayores libertades, de mayor confianza y mucha más eficacia que estos gobiernos democráticos que parecen vetustos con el paso del tiempo. Y que no se confundan estas palabras con un desprecio por la democracia. Tratamos de interpretar lo que vemos en el escenario geopolítico.

Gobernar debería tener unos fines específicos como base conceptual de cualquier gobierno o cualquier administración, y todos ellos deberían conducir hacia mejorar ineludiblemente la calidad de vida de las personas a las que gobiernan.

Le puede interesar:  Petro reconoce que el gobierno no está cumpliendo

Mejorar esa calidad de vida, pues nada tiene que ver distinto; no es diferente a que las personas tengan un buen sistema de salud, independiente de su conformación, atención y estructuración.

Que gocen de un sistema educativo en sus tres niveles lo suficientemente competitivo, excelente en sus resultados, que cada vez se mejora más, que cada vez se moderniza más, que se acopla a las necesidades del mundo, que no queda arraigado a viejas costumbres y que prepara personas no solamente académicamente certificadas, sino que prepara humanos, seres humanos.

Prepara antes que profesionales personas íntegras, honradas, competentes, polivalentes y que están dispuestas a cumplir un rol en su sociedad positivo. ¿Cómo no hablar de la seguridad, aspecto básico de cualquier ciudad civilizada?

La justicia que va ligada a esta, todo el componente de infraestructura, tanto de transporte público como de la movilidad particular, la soberanía y la independencia energética.

Y podríamos decir que, por último y sin el ánimo de excluir otros aspectos que para las personas sean importantes, hablaríamos de que la calidad de vida tiene que pasar transversalmente por una muy buena situación económica para todos los habitantes de ese territorio que es gobernado.

Pasa que, en los modelos democráticos, en algunos, cada vez se está viendo una mayor deficiencia, un mayor decrecimiento en todos los indicadores anteriormente mencionados, mientras que en otros modelos políticos estos cabalgan sin problema.

Gobernar tiene quizás una amenaza única, letal, excesivamente venenosa: es el ego, la vanidad, el egoísmo y el interés personal de los políticos por encima del interés colectivo.

Ese es el mayor enemigo de los gobernantes elegidos en modelos democráticos y eso está condenando a las naciones con este modelo a un atraso gigantesco que cada vez costará más y tardará más recuperarse.

Le puede interesar:  ¿Petro ve en Vargas Lleras a su rival a vencer en 2026?

Deberían las sociedades que quieran seguir viviendo bajo modelos democráticos ser muchísimo más exigentes con quiénes eligen, porque, con esto concluimos, de quiénes tanto se quejan, a quiénes tanto critican, a quiénes tanto culpan por sus desgracias, llegaron a esos cargos porque ustedes los eligieron.

Lea también:Estas son las nuevas tarifas de taxi en Medellin para 2025

Última hora

Te recomendamos

Le puede interesar

[mc4wp_form id=»74432″]