Este contenido hace parte de 360 Revista en su cuarta edición, la cual se distribuyó en las principales ciudades del país.
Por: Nicolás Gómez – Gerente de Desarrollo Sostenible del Grupo Prodeco
En un contexto cultural, social y ambientalmente complejo, diverso y rico como el colombiano, uno de los principales retos del sector minero es perder el miedo y “salir de la malla”, asumiendo de manera activa su rol como actor social significativo en los territorios donde opera, para trabajar de la mano del Estado, de las comunidades, ONG, organizaciones locales y la cooperación internacional en la construcción conjunta de un desarrollo sostenible a largo plazo de los territorios donde opera.
Sin embargo, los desafíos y oportunidades para el sector minero en materia de sostenibilidad no se presentan solo en la escala regional. En la escala nacional y global hay temas igualmente relevantes en los que debemos asumir un rol proactivo. Uno de esos temas clave es la gestión de cambio climático. Aunque este es un tema bastante amplio, que da para varias columnas, en esta ocasión nos vamos a referir de manera específica al tema del mercado de carbono en Colombia como una gran oportunidad para el sector minero colombiano.
En la última reforma tributaria de 2016 (Ley 1819 de 2016) se creó un impuesto al carbono sobre el contenido de carbono de combustibles fósiles líquidos y gaseosos, que deben pagar todos los usuarios de estos combustibles como parte de la tarifa que pagan por su consumo. Esta ley y su reglamentación posterior (decreto 926 de 2017) establecieron que dicho impuesto al carbono no se cobraría a las empresas o personas que demuestren haber compensado (neutralizado) las emisiones de carbono de los combustibles fósiles que ha consumido, lo cual se hace a través de bonos (créditos) de carbono generados en el mercado regulado (p.e. MDL) o en mercados voluntarios (p.e. VCS/Verra).
En abril de 2018, el Grupo Prodeco se convirtió en la primera empresa privada en Colombia en firmar un acuerdo multianual para la compra de certificados de carbono entre comunidades étnicas y una empresa privada comprometida a compensar sus emisiones de carbono, y adquirió los 40.000 créditos de carbono del proyecto REDD+ Pacifico (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación Forestal Evitada en el Pacífico Colombiano).
El 10 de junio de 2019, el Grupo Prodeco anunció la segunda compra de 1.200.000 certificados de carbono.
El acuerdo para la compra de certificados de carbono se logró con la participación de 20 comunidades étnico-territoriales de la región del Pacífico de Colombia, representada por la ONG Fondo Acción, a través del proyecto REDD + Pacífico, que sigue la iniciativa mundial de REDD + para reducir las emisiones derivadas de la deforestación y la degradación de los bosques y fue financiada por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional -USAID y apoyada por el Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible y Conservación Internacional.
Con la compra de los certificados REDD + Pacifico, se apoyará la conservación de 700.000 hectáreas de bosques naturales y el proceso de paz en la región del Pacífico colombiano; ratificando así el compromiso con la minería bien hecha y mejorando la calidad de vida de las comunidades vulnerables. Además de lo anterior, se están explorando oportunidades para desarrollar proyectos de carbono similares al REDD + Pacífico en la región nororiental del Caribe de Colombia, que permitan extender los beneficios socio-ambientales de este tipo de proyectos a la región donde operamos.
Creemos firmemente que el mercado de carbono representa una gran oportunidad para que la industria minera colombiana consolide y expanda su rol como aliados del desarrollo sostenible del país. Somos optimistas en que, desde el gobierno, los sectores productivos, las comunidades y las ONG sigamos apoyando y desarrollando este tipo de instrumentos económicos que permitan seguir construyendo un futuro próspero, sostenible y en paz para todos los colombianos.