La verdad es que el presidente Duque ha desarmado a la izquierda y a muchos seguidores del Centro Democrático que pretendían un mandato más belicoso.
Por: Jesús Vallejo Mejía
Gracias a Dios para nuestro país elegimos un presidente sereno, decente, conciliador, que ha trabajado muchísimo por el país en estos meses sin dejarse acorralar por nadie.
El presidente Duque es un gobernante demócrata que sabe que gobierna no sólo para quienes votaron por él sino para TODOS los colombianos.
¿Imaginan cómo habría sido esto de haber ganado el candidato opositor? El griterío y las amenazas contra el sector productivo serían enormes y muchos estarían tratando de irse con su dinero para invertirlo fuera de Colombia. El país estaría en proceso hacia una parálisis económica a pocos meses vista. Los ataques a los partidos opositores y medios de comunicación no afectos al presidente de izquierda, sería cosa de todos los días. Ese presidente gobernaría sólo para quienes votaron por él e iría desconociendo los derechos de quienes no votaron por él. La polarización sería total. Los discursos eternos movilizando los más brutales y primitivos sentimientos del ser humano serian cosa de todos los días. El Estado benefactor llenaría las instituciones del Estado de centenares de miles de puestos de trabajo, inoficiosos o innecesarios, agigantándolo a niveles insostenibles. Las ciudades serian sectorizadas y comandadas por grupos barriales dedicados a identificar los vecinos que no son afectos a su ideología y políticas para irlos acorralando y negándoles los servicios a que deberían tener derecho como ciudadanos.
Por todo lo anterior dedicaré buena parte de mis oraciones en este final del año 2018 para agradecer a Dios habernos dado Su protección y benevolencia en este año tan difícil para nuestra amada patria. Los invito a acompañarme en ese propósito.