El Centro Democrático se pronunció este 1 de diciembre y comunicó a la opinión pública la expulsión de Miguel Uribe Londoño de la contienda electoral del partido que busca candidato para el 2026. Sin embargo, el precandidato dijo ofiicialmente: «Lo reitero ni renuncio ni me renuncian».
El partido confirmó que el Dr. Miguel Uribe Londoño decidió no continuará para respaldar al Dr. Abelardo de la Espriella, movimiento que tomó forma en silencio durante el fin de semana y llegó de manera escalonada al expresidente Álvaro Uribe Vélez.
¿Qué pasó con Miguel Uribe Londoño?
Según relató el partido, el primer aviso lo entregó el domingo el propio De la Espriella al expresidente Uribe, a quien le informó que Uribe Londoño lo había llamado para comunicarle su salida del Centro Democrático y su apoyo político. El expresidente agradeció la transparencia y le respondió que procediera como considerara conveniente.
Horas antes, el sábado en la noche, Uribe Vélez había recibido un mensaje directo de Miguel Uribe Londoño. En él, el exfuncionario le anticipaba que estaba por tomar “una decisión muy seria” con su familia, que no asistiría al foro programado para el domingo y que necesitaba una reunión de diez minutos el lunes.
Sin embargo, el encuentro nunca ocurrió. El domingo en la noche, el expresidente Uribe le comunicó que no podría atenderlo por motivos personales y que cualquier asunto debía hacerse por mensaje escrito.
La mañana de este lunes la situación avanzó: Gabriel Vallejo, director del Centro Democrático, habló con Uribe Londoño, quien le anunció que enviaría unas preguntas por WhatsApp, sin ofrecer más detalles.
Tras conocerse formalmente la renuncia y el viraje político, el Centro Democrático expresó su agradecimiento a De la Espriella por la franqueza y confirmó que seguirá adelante con el proceso interno de selección presidencial, ahora exclusivamente con las precandidatas María Fernanda Cabal, Paloma Valencia y Paola Holguín.
El movimiento deja en evidencia la tensión interna que atraviesa el partido y abre un nuevo capítulo en la disputa por el liderazgo de la derecha en Colombia, justo cuando se acelera la carrera hacia 2026.
