No se deje influenciar por las encuestas

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EDITORIAL

Las encuestas, como se ha dicho popularmente en los últimos años, son como la morcilla, “todos se la comen pero nadie sabe cómo la hacen”. Lo lamentable es que estén alterando y manipulando la democracia y la libre elección de las personas.


Por: Redacción 360 Radio

Las encuestas son insumos que se tienen en las campañas políticas desde hace varios años, si hacemos un registro histórico nos encontramos con que la mayoría de ellas ha cometido errores garrafales y no les da pena retirarse del escenario político. Desde la victoria en las encuestas para Antanas Mockus, Sergio Fajardo con la ola verde, Oscar Iván Zuluaga, el Sí en el plebiscito, y otros casos donde se han dado como ganadores, gracias a las encuestas, Rafael Pardo en la Alcaldía de Bogotá o Juan Carlos Vélez en Medellín.

Podríamos encontrar centenares de ejemplos, pero lo peor de todo es que grupos empresariales, gremios, sectores de alta relevancia en cada una de las ciudades y departamentos de Colombia, se dejan influenciar por los resultados que son publicados por las distintas encuestadoras, unas legales, otras piratas y muchas que son inventadas y sacadas de un sombrero; pero la mayoría son financiadas por los mismos candidatos o por empresas que tienen intereses de por medio.

Las empresas o las encuestas financiadas por medios de comunicación tienen muestras pírricas con 200 personas cuando el universo de electores es de un millón, o peor aún, cuando el alcalde de una ciudad como Bogotá se elige con un millón de votos y la muestra de un sondeo son 400 encuestas.

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¿Qué sucede? Miramos con observación desde este medio de comunicación cómo las personas en ciudades como Cali, Bogotá y Medellín se están dejando manipular por las encuestas recientemente publicadas y están dejando de votar por candidatos que son de su confianza, para irse a engrosar la lista de votos de en contra de; un voto que no es democrático y que termina jugando a favor de quienes manipularon las elecciones.

Las personas deberían, en todo sentido, continuar hasta el día de las elecciones con sus candidatos, acompañándolos en las urnas, en sus recorridos, con su publicidad y esperando esa verdadera encuesta, que aunque suene cliché, es la del día de los comicios.

No se puede seguir permitiendo que unos pocos que ponen el dinero para las encuestas, manipulen la opinión pública y a los electores, peor aún, que existan personas que se dejan manipular y no hacen que su voto valga.

La invitación es a ser inteligentes, leer y dedicarle tiempo a conocer las propuestas de los candidatos si todavía no han tomado ninguna elección, pero lo más importante, que voten por el candidato de su confianza, no voten en contra de nadie o para atajar a alguien, se debe votar por el candidato que usted sabe, no lo va a decepcionar.

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