Hasta hace pocos días los dos mandatarios tenían una muy buena relación que incluso, causaba incomodidad en los sectores más defensores del presidente Duque y, por naturaleza, más contrarios al alcalde de Medellín.
Por: Redacción 360 Radio
La situación reciente que se ha dado en Medellín respecto al proceso de revocatoria que parece será inevitable tenga una jornada electoral dentro de los próximos 60 días, llevó a un hecho de distanciamiento en menos de una semana entre el presidente Iván Duque y el alcalde Daniel Quintero Calle.
El primer momento se dio después de las declaraciones que dio el alcalde a una revista del país, donde lanzó fuertes críticas y señaló con algunos términos ofensivos a un sector empresarial del departamento de Antioquia, a partir de eso, el presidente Duque le respondió a través de un comentario en Twitter ese mismo día. El pasado miércoles, Quintero, a través de un medio de comunicación, le envió un mensaje a Duque donde le pidió que no se metiera en la campaña de Medellín y que no se metiera en su Gobierno.
El presidente respondió, afirmando que él no recibe vetos, que no tiene salvedad, y estará donde deba estar.
Este medio de comunicación ha podido confirmar con ambas partes, es decir, tanto con Palacio de Nariño como con la Alcaldía de Medellín, que los comentarios que se han hecho en la cúpula de cada uno de estos gobiernos a sus entornos más cercanos, ha sido de total divorcio entre los dos mandatarios y se ha evidenciado que varios de esos más cercanos colaboradores han lanzado ataques directos e indirectos entre gobiernos.
Había una buena relación entre Duque y Quintero desde que inició labores el mandatario de la capital antiqueña. Primero, se dio una buena negociación tras confirmarse que Empresas Públicas de Medellín (EPM) llegaría al Caribe a través de Afinia, y el Gobierno Nacional apoyaba con el Metro de la Ochenta y, después, diferentes espaldarazos que el presidente dio a la administración local con obras cofinanciadas, recepciones en ministerios, agencias con las que Medellín está trabajando constantemente.
Una de ellas es el Sena, y claramente, apoyo a través de herramientas de fuerza pública. Por ejemplo, parte de los galardones que hoy tiene el alcalde se los ha entregado el Gobierno Nacional, por lo cual nunca existió una especie de veto o de reticencia desde el Gobierno a la alcaldía, además, uno de los ministros más importantes del Gobierno es bastante cercano al alcalde.
En medio de toda esta nueva confrontación entre los dos mandatarios, se puede afirmar que todo se terminará desenvolviendo con la posición que el presidente tome respecto a la revocatoria en Medellín, en término de fechas, el comportamiento del Ministerio del interior, del mismo alcalde ad hoc que designó el Gobierno – el viceministro Carlos Baena – quien manejará este proceso, y que se encargará de garantizarle al alcalde, en su momento, poder defenderse ante el Gobierno Nacional.
Al ser Medellín distrito especial, el presidente tendrá una competencia directa respecto a todo lo que concierne en el proceso de revocatoria.
Varios empresarios han hablado con altas fuentes del Gobierno, incluso con el mismo presidente, luego de los episodios acaecidos con Daniel Quintero y recibieron un apoyo del jefe de Estado y esto también ha llevado a esa misma solidaridad entre los dos sectores.
Al alcalde Quintero le resta esperar y conocer las fechas que define al Gobierno nacional para su revocatoria y los mismos parámetros que se dicten en este sentido, dando claridad al proceso y estando a la espera del aval del Consejo Nacional Electoral para tomar decisiones.