¿Qué partido pondrá al nuevo MinTIC?

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Es claro que una de las puntillas finales que recibió la ministra saliente Karen Abudinen fue propiciada por un partido político que puso en la mesa su apoyo a la reforma tributaria, poniendo como condición que Abudinen se fuera.


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Constantemente a la opinión pública, por activa o pasiva, se le engaña con actos supuestamente valerosos de algunos sectores del periodismo y la política que buscan en ciertos momentos regenerar su imagen y su mayor interés es establecerse dentro de una élite anticorrupción y la adalid de la ética y la moral.

De esta manera nacen ciertas investigaciones direccionadas, se filtra información subjetiva y a la vez selectiva; desde luego, todo el escándalo mediático que se arma está perfectamente calculado, es detallado y preciso para causar el mayor daño posible.

En el caso de la ministra saliente, Karen Abudinen Abuchaibe, se podrá observar que a partir de la fecha se acabarán los especiales periodísticos, se acabarán las “exhaustivas investigaciones” y se acabará la ola de congresistas que resultaron ser expertos en el sector tic, cuando nunca en su vida habían hecho un pronunciamiento sobre las telecomunicaciones o quizá no conocían el concepto espectro.

Además, ya poco o nada se dirá sobre el anticipo de los $70 mil millones, los cuestionamientos que se le deben hacer a la fiducia, que al fin y al cabo fue la encargada de dar el anticipo y está en obligación de responder por este; tampoco se dirá mucho sobre las investigaciones contra los integrantes de la Unión Temporal Centros Poblados. 

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La atención se centrará en quién pone el nuevo ministro TIC, pues el internet que hoy no tienen los niños pasará a un segundo plano. La cartera de las TIC siempre ha sido pretendida por dos partidos: el Liberal y Cambio Radical. El dirigente de este partido Germán Vargas Lleras, atacó a Abudinen y dio el envión de atacar a un ministro de Salud que él mismo puso haciendo presagios desastrosos sobre 1.500 muertes diarias y contagios superiores a los 35.000 por cuenta del coronavirus, cosa que nunca ocurrió.

Al ver el intento fallido de sabotear al ministro Fernando Ruiz, su artillería se dirigió contra Karen Abudinen. Todo esto originado en una fuerte pelea que el exvicepresidente Vargas Lleras tiene con la familia Char de Barranquilla, la cual en algún momento fue aliada incondicional cuando estaba en la arena política. Por ello, durante el debate de moción de censura a la ministra, la casa Char salió a relucir varias veces en medio de distintos discursos que se pudieron apreciar en ese momento.

Si bien Germán Vargas Lleras puede tener interés en colocar al nuevo ministro de las TIC, también es cierto que en el duelo pueda tomar más ventaja el partido Liberal del expresidente César Gaviria, pues su interés ha sido público en el sector de las telecomunicaciones. No fue en vano la cooperación de algunos medios de comunicación para sacar a la ministra, pues es claro el interés de grupos medios de ese tipo en licitaciones de emisoras de radio que por ejemplo Abudinen se había comprometido hacer y no las logró.

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Cuando la exministra Abudinen decide no continuar con la adjudicación de unos subsidios a varios medios de comunicación, esto lo conoce el país, un proyecto que se venía trabajando hace muchos meses y buscaba ser un paliativo para la situación de los medios tanto digitales como impresos y radiales en el país por la pandemia; esto desató la furia de las empresas que estaban participando en el proceso de los subsidios y terminaron dando el jaque mate a la funcionaria.

Realmente no es que Abudinen se vaya netamente por el tema de Centros Poblados, se va por rencillas políticas, por haber retirado el apoyo a medios de comunicación. Ni más faltaba, hay también una parte de esto por el escándalo de Centros Poblados, fue la punta de lanza pero no el núcleo de la decisión que tomó el presidente de la República Iván Duque, quien se vio muy presionado la última semana en el caso Abudinen.

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