Informes de inteligencia de Estados Unidos señalaron que Rusia ha intensificado los preparativos para una invasión de Ucrania a gran escala y tiene desplegado el 70% de las fuerzas que necesitaría para el ataque.
Por: Redacción 360 Radio
Moscú ha concentrado 110.000 soldados en las fronteras con Ucrania, y tendría capacidad suficiente para lanzar una ofensiva en dos semanas, de acuerdo con miembros de organismos de inteligencia que en los últimos días han mantenido reuniones informativas con congresistas de Estados Unidos representantes de sus aliados europeos.
La inteligencia estadounidense no tiene certeza – dijeron – sobre si el presidente de Rusia, Vladimir Putin, está decidido a pasar a la ofensiva.
Sin embargo, Putin quiere tener todas las opciones a su disposición: desde una invasión limitada de la región prorrusa de Donbás en Ucrania hasta una invasión total del país vecino, afirmaron os funcionarios. Por otra parte, Rusia ha negado reiteradamente esté aneando invadir Ucrania.
Según la inteligencia estadounidense, si Rusia opta por un ataque a gran escala, la fuerza invasora podría tomar la capital, Kiev, y derrocar al presidente Volodymyr Zelensky en cuestión de 48 horas.
El ataque dejaría entre 25.000 y 50.000 civiles muertos, además de entre 5.000 y 25.000 soldados ucranianos y entre 3.00 y 10.000 soldados rusos. Además, desencadenaría una avalancha de refugiados de uno a cinco millones de personas, principalmente hacia Polonia, sostuvieron los funcionarios.
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El presidente Joe Biden dispuso enviar tropas de Estados Unidos a Polonia para proteger a los miembros de la OTAN, mientras los diplomáticos trabajan arduamente para persuadir a Rusia de que retire sus tropas de la frontera con Ucrania.
El primer contingente de soldados estadounidenses llegó el pasado sábado 5 de febrero. Moscú anunció maniobras militares conjuntas con Bielorrusia, por lo que enviaron varios batallones al norte de Kiev y a la región de Brest, no lejos de la frontera con Polonia.
Los servicios de inteligencia han concluido que Rusia continúa reuniendo una importante fuerza militar en su frontera con Ucrania. Hace dos semanas, 60 batallones del ejército ruso se posicionaron al norte, este y sur de Ucrania, particularmente en la península de Crimea, que Rusia anexó después de una invasión en 2014.
No obstante, para el viernes ya había 80 batallones y 14 más estaban en camino desde otras partes de Rusia, explicaron funcionarios estadounidenses.