Llama la atención de muchas personas que la periodista Vicky Dávila ahora ande despotricando del Gobierno en términos muy fuertes, luego de que ella misma hiciera parte de esas “reuniones de medios” que ahora critica, pues aceptó continuas invitaciones a la Casa de Nariño como lo hacen la mayoría de directores de los “grandes” medios bogotanos e incluso su noticiero tenía pauta oficial del Gobierno a más no poder.
En internet todo queda registrado y en la cabeza de muchos de sus oyente aún se recuerda la venia que Dávila le hacía a los asuntos del Gobierno, obviamente y sin desconocer, que los dueños de ese medio tenían intereses personales superiores a los de informar de una manera responsable.
Lo que sucedió es muy normal y se produce en numerosos casos; el Gobierno no le siguió jalando a los intereses de ese poderoso grupo económico y vino la respuesta de ellos a través de sus distintas empresas, sobre todo las que son medios de comunicación, donde fue evidente el viraje en contra del gobierno Santos y la campaña que se inició fue fuerte y con consecuencias lamentables, como la de publicar un video íntimo de un exviceministro.
La pregunta es clara, ¿Solo ahora Vicky Dávila se dio cuenta de todo lo malo del gobierno de Juan Manuel Santos?, ¿Solo ahora que está por fuera de la rosca y no tiene empleo en ningún medio de comunicación?. Las personas ya no son tan ingenuas y han reflexionado sobre esos sorpresivos cambios, pues para uno pasar de alabar a un Gobierno más de cuatro años, para ir a atacarlo con toda una artillería, solo se necesita un profundo resentimiento.