El transporte terrestre de carga en Colombia enfrenta una crisis silenciosa pero creciente. Desde hace más de un año, los problemas relacionados con la devolución de contenedores vacíos en el puerto de Buenaventura han encendido las alarmas entre los actores de la cadena logística.
Esta semana, la Federación Colombiana de Transportadores de Carga por Carretera (Colfecar) emitió una advertencia contundente: el país está al borde de un colapso logístico si no se adoptan soluciones estructurales de manera inmediata.
Panorama general: La raíz del problema, según Colfecar, se encuentra en la incapacidad de las líneas navieras para evacuar contenedores vacíos de las terminales. Esta omisión ha generado un represamiento creciente en los puertos de Buenaventura y en los patios externos, afectando directamente a los transportadores que deben operar en estos espacios para cumplir con sus compromisos.
Pero el problema va más allá de una simple acumulación. La situación ha generado reprocesos logísticos que no solo consumen tiempo y recursos, sino que además están disparando los sobrecostos operativos de manera insostenible.
“La falta de coordinación entre los actores de la cadena ha transformado una situación operativa en una crisis estructural”, indicó Colfecar en su más reciente comunicado. “El transportador no tiene instrucciones claras sobre cuándo, dónde ni cómo devolver los contenedores. Esto ha creado un caos en los puntos de enturnamiento”.
Desde @Colfecar hacemos un llamado a la instalación inmediata de una mesa de trabajo interinstitucional ante la grave problemática que se vive en el puerto de Buenaventura con relación a las demoras excesivas en la entrega de contenedores vacíos.@MinTransporteCo… pic.twitter.com/86GDNYMQlu
— Colfecar (@Colfecar) May 16, 2025
Colfecar propone una mesa de solución inmediata
Por qué es importante: En medio de este escenario, miles de conductores de carga pesada se han visto obligados a interrumpir sus labores ante la imposibilidad de realizar entregas o devoluciones. Las demoras, que en algunos casos se extienden por días, han derivado en decisiones drásticas como los bloqueos a terminales portuarias y patios de contenedores.
Para los transportadores, el impacto no es solo económico. Muchos de estos trabajadores viven al día, y los ingresos dependen de cada viaje completado. La parálisis actual pone en riesgo el sustento de cientos de familias.
“Esta no es una crisis de un gremio aislado. Es una falla sistémica que compromete al comercio exterior, a los agentes de aduanas, a los operadores logísticos y, sobre todo, a la competitividad nacional”, reiteró Colfecar.
Detalles: Ante el deterioro progresivo de la situación, el gremio hizo un llamado directo al Gobierno Nacional para la creación de una mesa de trabajo interinstitucional, con participación de los ministerios de Transporte y Comercio, la Superintendencia de Transporte, la DIAN, las terminales portuarias, las navieras, los patios de contenedores, y todos los actores implicados.
El objetivo: diseñar soluciones estructurales que garanticen el flujo eficiente de los procesos de comercio exterior y prevengan un colapso logístico que tendría repercusiones severas para la economía nacional.
“Colombia no puede darse el lujo de perder competitividad por errores logísticos repetitivos. La parálisis que enfrentamos hoy exige liderazgo institucional y decisiones técnicas que estén a la altura del desafío”, concluyó el gremio.