Invamer presentó los resultados de su más reciente encuesta en la que consultó por la aprobación o desaprobación de la gestión de Gustavo Petro como presidente de Colombia y sus acciones.
A la pregunta «En general, øusted aprueba o desaprueba la forma como Gustavo Petro, se está desempeñando en su labor como Presidente de Colombia?», los colombianos fueron contundentes y mostraron firmeza en las respuestas.
A nivel global y total la desaprobación alcanza un 60% mientras que la aprobación solo llega a un 29 % en junio de 2025.
Aprobación de Petro por ciudades
Curiosamente, Bogotá, uno de los lugares más fuertes para Petro ha mostrado su descontento con el mandatario. Desde febrero de 2023 existe una alta cifra de desaprobación de la gestión del presidente. Hoy, en junio de 2025, la desaprobación es del 64 %.
Ciudades como Medellín alcanzan el 81 % de desaprobación, Baranquilla 57 %, Bucaramanga 72 %, Cali 51 % y Cartagena 50 %.
Petro y los jóvenes en Colombia
Algo curioso pasa con los rangos de edades y lo que piensan de la gestión del Presidente de Colombia, pues muestran no estar contentos o a gusto con las decisiones y acciones que ha tomado en los últimos meses.
Los jóvenes de 18 a 24 años siempre han tenido una línea clara de respaldo a Petro pero en la última medición de Invamer la desaprobación fue del 49 % y la aprobación del 41 %. De 25 a 34 años, la desprobación alcanza 61 % y de 35 a 49 años una desprobación del 70 %.
Ahora bien, analizando los datos por estratos sociales, ni siquiera los estratos 1 y 2 respaldan al presidente sentenciando una cifra de desaprobación de 62 % vs. un 32 % de aprobación.
El estrat 3 también desaprueba la gestión del presidente con 63 % y los demás estratos (4, 5 y 6) un 75 %, lo que confirma que al presidente le está yendo mal en todos los sectores de la población colombiana.
Desde que asumió el cargo en agosto de 2022, la desaprobación del presidente Gustavo Petro ha aumentado de forma constante. En sus primeros meses, pasó de tener una aprobación significativa a registrar altos niveles de rechazo en distintas encuestas.
Las principales causas detrás del descontento incluyen un recrudecimiento de la inseguridad ciudadana, el aumento de la producción de cocaína y la persistencia de ataques armados por parte de grupos ilegales, lo que ha generado una percepción de deterioro en el orden público.
En el ámbito político, el gobierno ha estado marcado por escándalos, tensiones institucionales y crisis internas. Casos como interceptaciones ilegales desde la Casa de Nariño, señalamientos de corrupción en entidades del Estado, y enfrentamientos entre altos funcionarios han minado la confianza ciudadana.
Excolaboradores cercanos al mandatario han criticado públicamente su estilo de liderazgo, tildándolo de autoritario, inestable y poco receptivo al diálogo, lo que ha fortalecido la percepción de improvisación y desorden en su administración.
Además, el enfoque del presidente Petro para impulsar reformas estructurales ha generado resistencias dentro del Congreso, en sectores empresariales y en la opinión pública. Su insistencia en avanzar con transformaciones profundas en los sistemas de salud, pensiones y trabajo, junto a un discurso confrontacional y un estilo poco conciliador, ha incrementado la polarización política.
Esto ha llevado a muchos ciudadanos a ver su gestión como radical y poco efectiva, lo que se refleja en los altos niveles de desaprobación registrados a lo largo de su mandato.
FICHA TÉCNICA