Las propuestas de Gustavo Petro mantienen la incertidumbre para la Economía de Colombia, según BRC Ratings.
BRC Ratings – S&P Global, presentó su informe Perspectivas macroeconómicas de LATAM y retos del sector financiero en Colombia en el que se expusieron las expectativas sobre las economías de la región, seguido de la visión de la calificadora sobre la evolución de las calificaciones del sector financiero y, finalmente, los principales retos para la industria aseguradora, bancaria y de administradores de activos.
En primera medida, BRC Ratings señaló que “la incertidumbre política en los últimos años ha tenido un impacto negativo en la inversión privada, lo cual reduce el crecimiento económico, al igual que la recaudación fiscal”. Para esta firma, existe un alto nivel de incertidumbre sobre las trayectorias de las reformas propuestas por el Gobierno de Gustavo Petro lo que generaría una reducción en el apetito de los inversionistas por activos locales.
De acuerdo a lo señalado, la perspectiva de BRC Ratings sobre el crecimiento de la cartera para 2023 es de ralentización en todos los segmentos de crédito, particularmente en consumo. “La desaceleración de la economía y las tasas de interés altas han derivado en una menor demanda de crédito. A esto se le suma la inflación elevada y el alto endeudamiento de los hogares”, expresaron.
“Nuestra proyección de crecimiento anual de cartera para la banca colombiana al cierre de 2023 está alrededor de 8% (7.5%-9%), con una cartera en mora de 30 días aumentando a niveles similares a los máximos observados en el primer año de la pandemia y de los últimos 10 años: sobre el 5%”, agregaron.
Otro punto relevante en el informe es que la construcción es uno de los sectores que incide de forma importante en la definición de los escenarios dada su importancia en el PIB. “Consideramos que la banca colombiana muestra una exposición manejable al sector de la construcción; alrededor del 10% de la cartera comercial total”.
¿Cuál es el país con mejores perspectivas en América Latina?
Según este análisis, México se destaca en la región por ser un país relativamente bien posicionado para afrontar tasas de interés neutrales y la deslocalización. Además, los déficits relativamente pequeños en cuentas externas y cuentas fiscales hacen que México pueda afrontar un contexto global de tasas de interés más altas.