El Carnaval de Barranquilla, una de las fiestas más esperadas y representativas de Colombia, promete dejar un impacto económico significativo en la región. Según estimaciones de la Alcaldía de Barranquilla y la Cámara de Comercio local, la edición de 2025 generará alrededor de $880.000 millones en actividad económica, además de impulsar la creación de 193.000 empleos directos e indirectos.
Panorama general: El Carnaval no solo es una celebración cultural de gran importancia, sino también una plataforma que dinamiza diversos sectores económicos, como el turismo, el comercio, la hotelería y la gastronomía.
Este año, se espera la llegada de aproximadamente 780.000 visitantes, quienes asistirán tanto a eventos públicos como privados durante los días principales de la festividad.
El impacto económico del evento ha sido calculado con la herramienta «Event Impact Calculator (EIC)», desarrollada por Oxford Economics & Destinations International, la cual permite medir con precisión los beneficios financieros que trae consigo una festividad de esta magnitud.
Carnaval de Barranquilla 2025: Impulso económico y crecimiento del turismo
El alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, expresó su entusiasmo por la magnitud del evento y la preparación de la ciudad para recibir a miles de visitantes nacionales e internacionales. «Lo que ha sucedido en los últimos días con el concierto de Shakira es solo un abrebocas de lo que viviremos en el Carnaval de 2025. Estamos listos para mostrarle al mundo por qué Barranquilla es el epicentro de la fiesta», afirmó el mandatario.
Por qué es importante: Según las proyecciones, el total de entradas a eventos, incluyendo los de precarnaval, superará los $2,1 millones, una cifra que refleja el creciente interés y participación en esta tradición centenaria. Con una amplia programación de desfiles, conciertos y espectáculos, el Carnaval de Barranquilla se consolida como un evento de referencia en el calendario cultural de América Latina.
Con estos datos, Barranquilla reafirma su posición como un destino turístico de alto impacto, donde la cultura, la economía y la tradición se entrelazan para generar oportunidades y fortalecer la identidad local.