Llamó la atención la respuesta del Gobierno Nacional frente a la solicitud de la guerrilla de las Farc, para que les sean adjudicadas de manera directa curules en el Congreso de la República por al menos dos periodos, que no hay otro nombre que “dar curules a dedo”, uno de los puntos más críticos del proceso y del cual la oposición es profundamente rehacía y lo reprueban desde todo punto de vista.
Frente a esto, la respuesta del Gobierno ha sido: “Es fundamental la participación política de los integrantes de las Farc”.
Esa exigencia de este grupo guerrillero llamó la atención en algunos círculos, aunque para muchos no es sorpresa, ya que las Farc saben que por votos populares nunca podrían llegar al poder, o al menos eso se cree dentro la opinión pública, mientras que sí se les asignan “Curules a dedo” en el Congreso, la democracia se podría ver muy perjudicada, pero también sería una de los puntos que el Presidente ha mencionado de “Tragarse los sapos” y el de arriesgar justicia por paz.
El Ministro del Interior señaló que no es una solicitud nueva por parte de las Farc, ni una idea nueva en el proceso de negociación en nuestro país. “Tratan que quienes han ejercido la violencia empuñando las armas como medio para hacer política, las dejen y empiecen a hacer política sin el uso de las armas en todas las regiones”.
Juan Fernando Cristo acuñó la frase que mencionamos al inicio de este artículo y el cual lo tiene envuelto en una polémica, pues antes se negaba a que las Farc llegaran al Congreso sin que pasaran por un proceso absolutamente democrático, como cualquier otro colombiano de bien que quisiera llegar al Congreso de la República.
Cristo acordó que ese tema nunca se ha abordado en la mesa de negociaciones y que solamente se había acordado la creación de las circunscripciones especiales en las regiones más afectadas por el posconflicto. Ahora dice que todo es para dialogar, pero no se saldrán de la agenda que fue pactada con el Gobierno Nacional.
La petición de la guerrilla de las Farc para analistas del proceso de paz tiene dos caras: primero una que ha sido totalmente rechazada por la opinión pública y va aumentar la reprobación de los colombianos, mientras que otros creen que es una condición necesaria para que el proceso de paz pueda fluir.
Pasarán los días en las negociaciones y se conocerán las posiciones para poder definir qué será lo que va a pasar de cara a la participación de las Farc en política.