El informe de la OCDE, titulado «Reformas de la política fiscal 2024», revela que Colombia se posiciona como el segundo país con menor recaudo por impuesto de renta a personas naturales, alcanzando solo un 6,8% del total de impuestos recaudados, muy por debajo del promedio del organismo, que se sitúa en 23,7%. Este panorama se agrava al compararlo con otros grupos económicos; en naciones de ingresos bajos, la contribución del impuesto de renta a personas naturales representa el 16,8% de los ingresos fiscales, mientras que en países de ingresos medios es del 13,1%.
Análisis de la OCDE sobre el bajo recaudo por impuesto de renta en Colombia y sus implicaciones fiscales
Este problema no es nuevo. La OCDE señala que el bajo recaudo por renta de personas naturales en Colombia es un desafío histórico que ha persistido a lo largo de los años. En 2023, la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) reportó que más de 5,4 millones de colombianos presentaron su declaración de renta, lo que resultó en ingresos por $19,66 billones para el fisco. Para este año, se espera que el monto alcance los $25 billones, evidenciando un incremento en las declaraciones, pero sin el correspondiente aumento en la carga fiscal.
El informe también destaca la situación de otros países en la región y en el mundo. Costa Rica se ubica en el primer lugar en cuanto a menor recaudo, con apenas 6,2% de los impuestos provenientes del impuesto de renta a personas naturales. En contraste, países como Dinamarca y Estados Unidos muestran una relación más equilibrada entre el recaudo de renta de individuos y de empresas. En Dinamarca, por ejemplo, el 52% de cada US$100 recaudados proviene del impuesto a la renta de personas naturales, mientras que en EE.UU. la cifra es del 42,9%.
Este balance favorable en países desarrollados se traduce en una mayor capacidad del Estado para financiar servicios públicos y programas sociales, lo que permite un desarrollo más equitativo y sostenido. En contraste, el bajo recaudo en Colombia limita la capacidad del gobierno para invertir en infraestructura y bienestar social, aspectos fundamentales para el crecimiento económico.
Las razones detrás del bajo rendimiento del impuesto de renta en Colombia son múltiples y complejas. En primer lugar, se destaca la existencia de una base tributaria reducida, que se traduce en un número limitado de contribuyentes que aportan significativamente al fisco. Muchos colombianos aún no están en la capacidad de cumplir con sus obligaciones fiscales debido a la informalidad del mercado laboral, donde se estima que cerca del 60% de la población trabaja en el sector informal.
El informe de la OCDE también plantea recomendaciones clave para mejorar la situación fiscal de Colombia. Se sugiere diversificar la base tributaria, reformar el sistema de incentivos fiscales y fortalecer la administración tributaria para optimizar el cumplimiento. También se enfatiza la importancia de realizar campañas de concienciación sobre la importancia del pago de impuestos y sus implicaciones para el desarrollo del país.
A medida que Colombia se enfrenta a estos desafíos, es crucial que los tomadores de decisiones y la sociedad civil trabajen juntos para construir un sistema fiscal más justo y equitativo que permita un desarrollo sostenible y una mejora en la calidad de vida de todos los colombianos. La situación actual no solo resalta la necesidad de una reforma fiscal urgente, sino también la oportunidad de crear un entorno más sólido y resiliente que beneficie a las futuras generaciones.