Por: Redacción 360 Radio
Desde el año 2002, se habían presentado 18 intentos fallidos para reformar la justicia en Colombia y esta propuesta, que es la número 19, fue finalmente aprobada ayer en su último debate con 68 votos a favor y 15 en contra.
Esta reforma, que surgió de proyectos presentados por el Ministerio de Justicia, el Consejo Superior de la Judicatura y varios congresistas, contempla la adopción del expediente digital, la capacidad del Consejo Superior para crear juzgados itinerantes en diferentes zonas del país y un punto sobre equidad de género para que el 50 % de los altos magistrados sean mujeres.
En sí, la Reforma a la Justicia busca fortalecer el sistema judicial colombiano, pero lo que se ha robado la atención dentro de este proyecto de ley es el conjunto de «micos» que trae, como la reducción de requisitos para aspirar a ser fiscal general, procurador, defensor del pueblo o registrador nacional, algunos de los cargos más importantes de la política nacional.
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«Para acceder a los cargos de magistrados de altar cortes, procurador, fiscal y otros, los requisitos se han relajado. Parece ser que este cambio es para favorecer a particulares», dijo al respecto Freddy Machado, presidente de Asonal Judicial.
En este sentido, hace unas semanas, Gloria Stella López, presidenta del Consejo Superior de la Judicatura, denunció algunas modificaciones que se le hicieron a este proyecto durante los debates que tuvo en la Cámara de Representantes. Modificaciones que, según López, «desdibujan el espíritu original del texto» presentado por el Consejo Superior.
Dichas modificaciones otorgarían facultades electorales y administrativas a los magistrados de la Comisión Interinstitucional.
Así las cosas a esta ley, de carácter estatutario, le hace falta conciliar un texto que contemple las propuestas presentadas por las partes y aprobadas por el congreso, así como el visto bueno de la Corte Constitucional y la sanción presidencial.