La Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia emitió órdenes de captura contra Iván Name y Andrés Calle, ambos expresidentes del Congreso de la República, por su presunta vinculación con un esquema de corrupción que habría desfalcado millonarios recursos públicos de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
Según fuentes judiciales, las investigaciones preliminares apuntan a que los excongresistas habrían recibido sobornos o facilitado la adjudicación irregular de contratos a cambio de favores políticos y económicos, en un entramado que compromete a varios funcionarios y exfuncionarios de alto nivel.
El escándalo en la UNGRD ha generado una profunda indignación en la opinión pública, ya que los fondos desviados estaban destinados a atender emergencias humanitarias, desastres naturales y situaciones críticas en zonas vulnerables del país.
La Corte Suprema argumentó que las medidas cautelares responden a la gravedad de los hechos y al riesgo de obstrucción a la justicia. En las próximas horas, se espera que la Fiscalía General de la Nación coordine con la Policía Judicial para hacer efectivas las capturas.
Este caso reaviva el debate sobre la corrupción en el manejo de recursos públicos y la necesidad de reformas estructurales en el sistema de control y vigilancia estatal.
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