«Precisamente aquí, donde conmemoramos nuestras victorias, te decimos: ¡hasta la victoria siempre!» estas fueron las palabras con las que el actual presidente de Cuba, Raúl Castro despide en multitudinario acto de Estado al fallecido líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz.
Por: John E. Arango Ocampo.
Twitter: @JohnArango27
La Plaza de la Revolución en La Habana, Cuba, presenció la noche anterior uno de los actos más multitudinarios; el homenaje póstumo que el pueblo cubano, las autoridades locales y la comunidad internacional le hace al líder de la revolución y ex presidente de la isla, Fidel Castro Ruz.
El acto de Estado encabezado por el ahora presidente de Cuba y a su vez hermano del fallecido, Raúl Castro, contó con la presencia de cerca de 50 mil personas y a su vez con el acompañamiento de más de 50 delegaciones internacionales que iban desde presidentes latinoamericanos, hasta el Rey Emérito de España, Juan Carlos I. Con las cenizas de Fidel y la multitudinaria asistencia comenzó la recta final de los homenajes al hombre odiado y amado que cambió en la década de los 50 la dirección de la isla caribeña.
En su primera intervención después de anunciar el pasado viernes la muerte de su hermano, Raúl Castro habló de las múltiples historias que vivió con Fidel y repasó uno a uno los hitos que ambos llevaron a cabo. Así mismo los presidentes de los que para Cuba son países amigos, también tuvieron su oportunidad de dirigirse a la multitud. Por Ecuador lo hizo Rafael Correa quien resaltó que el ejemplo de Fidel trascenderá en el tiempo; lo propio hizo Evo Morales, presidente de Bolivia, quien afirmó que Fidel “no ha muerto, está más vivo que nunca, más necesario que nunca”. De igual forma el presidente venezolano, Nicolás Maduro, dijo que “Fidel, «se queda invicto entre nosotros, absolutamente absuelto por la historia grande de la patria». Por su parte los presidentes de México, Enrique Peña Nieto, y de El Salvador, Salvador Sánchez, recordaron que sus países fueron el punto de partida para la lucha revolucionaria de Fidel.
Otros líderes mundiales que asistieron al acto fueron Daniel Ortega, presidente de Nicaragua; José “Pepe” Mujica, ex presidente de Uruguay; el gobernador general de Canadá, David Johnston Juan Carlos I, Rey Emérito de España; Robert Mugabe, presidente de Zimbabue; Jacob Zuma, presidente de Sudáfrica; Teodoro Obiang, presidente de Guinea Ecuatorial, el primer ministro griego, Alexis Tsipras y el presidente de la Duma del Estado o Cámara de Diputados de Rusia, Viacheslav Volodin.
Brillaron por su ausencia el presidente ruso Vladimir Putin; el presidente de Estados Unidos, Barack Obama; el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, la presidente de Chie, Michelle Bachelet; el de Argentina, Mauricio Macri, y el peruano, Pedro Pablo Kuczynski; todos ellos enviaron en su representación una delegación menos el gobierno estadounidense.
Con este acto se puso fin a los dos días de homenajes en La Habana por los que pasaron cerca de un millón de personas a despedir a su “eterno comandante”. Ahora las cenizas del líder de la revolución se trasladan hacia Santiago de Cuba, cuna de la revolución, haciendo el mismo recorrido que hizo Castro cuando inició el camino de la Revolución Cubana hace ya más de 50 años. Esta vez la “Caravana de la libertad” se hará en sentido contrario y pasará por las mismas provincias por las que el hoy fallecido comandante gestó la revolución; todo esto finalizará el próximo 4 de diciembre cuando en el cementerio Santa Ifigenia, el mismo en el que descansan los restos del icónico José Marti, reciban a Fidel Castro para descansar por toda la eternidad.