Estos son los datos de la venta de la participación de EPM en Tigo

Compartir

Llegó la hora de que el Concejo de Medellín debata sobre la necesidad que la principal compañía a nivel público de la capital antioqueña y una de las más grandes del país tiene, al haber puesto en consideración del Concejo la necesidad de la venta de su participación en Tigo Une Telecomunicaciones.


Por: Redacción 360 Radio

En el año 2014, la administración de Aníbal Gaviria decidió vender el 50 % de su participación en la compañia UNE EPM Telecomunicaciones. Esa compañía, contempla que el 50 % más una acción está bajo el control de EPM y el resto es de la multinacional sueca Millicom, a quien se le vendió en ese año la participación y quien opera en Colombia bajo el nombre comercial de Tigo.

La relación ha tenido picos y valles, su papel en la ciudad ha estado luego de vender la prima de control a esta compañía alejado de los ambientes políticos y de las discusiones públicas, lo que es un deseo de la mayoría de accionistas privados en cualquier compañía del mundo, y desde luego en un sector como el de las telecomunicaciones que demanda altísimos niveles de inversión en dólares.

Es claro que los gobiernos tienen cada vez menos margen de maniobra a la hora de tener participaciones totales o parciales en compañías de telecomunicaciones. La misma OCDE, grupo de países de buenas prácticas del que hace parte Colombia, ha hecho distintas recomendaciones a los gobiernos en todo el mundo para que desinviertan en el sector telco y se lo dejen al sector privado, pues consideran que es bastante peligroso jugar con las finanzas públicas que están expuestas constantemente a un detrimento en compañías que requieren no solamente competir con libertad y con una capacidad que solamente la garantiza el sector privado, sino que los gobiernos tienen que dedicarse cada vez más a sus menesteres y no en donde tienen que estar las compañías del sector privado. La OCDE le ha hecho esas recomendaciones al Gobierno colombiano en los términos de su participación en la compañía Coltel, Telefónica, Movistar Colombia. 

En los últimos tres años las consultoras Mckinsey & Company y Oliver Wyman ya habían hecho una recomendación estratégica a EPM incluso antes de que ocurriera la contingencia de Hidroituango, donde mencionaban la necesidad de desinvertir en este sector considerando los contextos de la industria de telecomunicaciones, pues eran activos no estratégicos de la empresa y desde luego de la que no tienen control; esa fusión del año 2014 fue polémica.

Tigo Nueva 1280x720 1 1000x600 1

LEER TAMBIÉN: Claro y Tigo, los mejores operadores del país

Ahora, EPM tiene una necesidad y es invertir adicionalmente por más de $2 billones para poder culminar Hidroituango, a esto se le suma la pérdida del grado de inversión recientemente según Fitch & Ratings, por lo cual salir al mercado financiero será más complejo y costoso, y pues esos costos futuros para EPM van a poner en riesgo no solamente su nivel de maniobra sino su capacidad de acción frente a un mercado que tiene muchos compromisos y sobre todo proyectos tan importantes como la reciente entrada en operación del mercado de la Costa Caribe con Afinia.

A nivel político la situación es muy clara. En la administración de Federico Gutiérrez no se decidió vender la participación cuando era el momento más estratégico y en el que se podía recibir un mejor monto por esa sociedad; su administración no solo descartó el estudio de Oliver Wyman sino las recomendaciones de expertos del sector incluso de concejales en su momento y en el caso de Daniel Quintero, este fue siempre partidario de vender ese 50 % más una acción que la Alcaldía tiene en Tigo UNE.

Quintero no solamente lo mencionó antes de ganar, sino que cuando ganó dijo que: «o nos venden, o les compramos, pero no queremos seguir siendo socios bobos de una compañía que no da dinero». En ese momento, Quintero recibió fuertes críticas de expertos del sector, decían que no se podía desvalorizar una inversión, una participación para luego venderla; es una mala estrategia de venta. Pero en el fondo, Quintero tenía razón porque en los años tanto 2017, 2018 y 2019, las proyecciones que el Concejo de Medellín había estimado luego de la fusión no se cumplieron; esos tres años fueron de pérdidas continuas para Tigo. Nada más en el 2017 y en el 2018 fueron más de $42 mil millones en pérdidas, y al 2019 EPM tampoco había recibido ni un solo dividendo por cuenta de esta participación.

Le puede interesar:  Ecosistemas de Innovación: la nueva apuesta de MinTIC para transformar a las regiones

Este medio de comunicación había informado en los dos últimos años de la administración de Federico Gutiérrez que luego de varias consultas con bancas de inversión, con compañías de telecomunicaciones y con gremios, el precio estipulado de una eventual venta del 50 % más una acción podía estar cercana a los $4 billones, cifra que hoy no se cumpliría y que podría estar entre los $3 billones y $3.5 billones.

En la actualidad, la situación tiene que ver con que la Alcaldía presenta al Concejo de Medellín el proyecto de acuerdo para vender esa participación no controlante con el fin de que EPM reciba el dinero proporcional a esa venta, y luego el Concejo tendrá que debatirla y darle trámite como tal a ese proyecto.

1594084448 033224 1594084710 noticia normal

LEER TAMBIÉN: Tigo es el operador que ofrece la mejor experiencia en redes celulares

La situación política en Medellín puede ser la más compleja en los últimos 15 años, el acalde cuenta ahora con más oposición que cuando inició su periodo. Tiene un gran riesgo, y es que el debate de esta venta se torne político y no técnico, que es como debería ser, de una manera responsable no solamente con las finanzas de EPM y de la participación sino con las finanzas de la ciudad.

Es cierto que Tigo ha ganado terreno en el año 2020 de manera significativa, la pandemia trajo aceleración en la digitalización del país. Medellín como sede de la Cuarta Revolución Industrial ha ganado un estatus dentro del mercado de telecomunicaciones y aún le falta muchísimo por hacer en este sector, no puede quedarse inerte con el aviso del centro de la Cuarta Revolución Industrial y no avanzar, tiene que dar pasos en esa dirección.

Para algunos concejales consultados por este medio, la valorización del mercado de las telecomunicaciones durante la pandemia y este nuevo contexto de Medellín como un posible hope digital de Latinoamérica no justificaría una venta en dicha compañía que viene creciendo. Es cierto, si bien los primeros cuatro años luego de la fusión fueron desastrosos para Medellín y la Contraloría realizó varias alertas de una pérdida de valor en esa inversión, hoy Tigo presenta esta situación.

En el año 2020, tuvo $4.84 billones en ingresos, un ebitda de $1.62 billones; en el 2019 fueron $4.92 billones de ingresos y $1.63 billones de ebitda. Para el 2020 tenía 1.647.718 líneas fijas, para el 2017 1.697.944 líneas fijas, 1.800.350 accesos a internet, en el 2019 1.215.771, a nivel de voz y datos prepago en el 2020 tenía 10.718.770 ususarios y en el 2019 9.804.339, y en pospago, en el año 2020, 1.784.516, y en 2019 1.837.236.

En el año 2020, luego de que Tigo participa en la subasta de espectro en diciembre del año 2019, con una oferta bastante alta para el Gobierno y para muchos expertos del sector fue un poco mayor de la que se necesitaba, desplegó 2.300 antenas en la banda de 700 MHz, convirtiéndose en uno de los operadores de toda Latinoamérica con la mejor infraestructura en bandas bajas, invirtió más de USD 20 millones y en el año 2021 se ha convertido en el operador que más clientes ha ganado en el primer y segundo trimestre de este año.

Si bien Tigo aún no alcanza a Movistar para convertirse en el segundo operador en número de líneas, sí lo ha sobrepasado como operador con mejor calidad y servicio alcanzando el segundo lugar en las certificaciones, premios o distinciones que Open Signal ha entregado y se ha convertido junto a Claro en los dos mejores operadores del país no solamente porque Movistar ha venido desmantelando sus inversiones, su operación y su capacidad de acción en Colombia sino porque Tigo se la ha ganado en franca lid en una competencia muy a la par con Claro.

1479910523 335191 1479910605 noticia normal

LEER TAMBIÉN: Tigo vacunará a sus colaboradores en julio

Al 2020 Tigo tenía 12.5 millones de líneas, ha venido incrementando como lo reportamos. Movistar tenía 16.3 millones de líneas y Claro tenía 33 millones de líneas, Virgin Mobile 2.8 millones de líneas.

Le puede interesar:  El nuevo gran negocio de las telecomunicaciones en Colombia

Este año con la entrada de WOM el mercado se ha diversificado pero no ha golpeado a Tigo como tampoco a Claro;los más golpeados han sido Movistar y el mismo Avantel, que ha venido decreciendo en el número de usuarios pues ha sido una portabilidad entre ellos mismos: los usuarios de Avantel han pasado a WOM.

En el acceso a internet, Claro tiene 3.07 millones de accesos, UNE 1.62 millones, y Movistar 1.10 millones; y en acceso a móvil a internet Claro tiene 18.1 millones, Movistar 7.6 millones, Tigo 4.8 millones; en telefonía fija, Claro tiene 2.8 millones, Tigo 1.6 millones y Movistar 1.4 millones.

El negocio de la telefonía fija viene cayendo estrepitosamente en los últimos cuatro años, desde el 2018 viene en picada. Eso va en detrimento de un core del negocio de Tigo, que ha sido Medellín en telefonía fija por haber heredado todas las líneas que tenía en su momento EPM y que luego tuvo UNE. Hoy la realidad es que menos personas tienen teléfonos fijos en sus casas.

A nivel de televisión es un negocio que también viene cayendo, son menos personas las que están instalando señales satelitales o de cable en sus domicilios pues la televisión y los servicios de plataforma en streaming están ganando mucho más espacio en la vida del consumidor colombiano con plataformas como Disney +, HBO, YouTube, Netflix, Spotify, entre otras. Y plataformas deportivas también prestan servicio a través de streaming y el negocio de la televisión se viene desplazando hacia ese lugar, al mismo que ha ido la telefonía.

¿Quién va a comprar la participación? Es la gran incógnita. Es importantísimo señalar la cláusula drag along, la cual está vigente y activa permite a los accionistas de la compañía entrar a barajar de nuevo las condiciones de la sociedad: o Tigo le compra a  EPM la participación que ellos tienen, el 50 % más una acción, o EPM se las compra a ellos, cosa que no va a pasar por más que el alcalde Quintero lo haya dicho al comienzo de su administración.

También existe la posibilidad de buscar a un tercero que le compre la participación a Tigo, o le compre la participación a la Alcaldía de Medellín, o la compre toda. ¿Cuáles terceros pueden ser? Hay pocos en el mercado pero uno de los posibles interesados, si Tigo no hace esa compra, sería Liberty, una compañía que en los últimos años estuvo haciendo sondeos en Colombia para comprar algunas filiales del sector, entre ellas Telefónica Colombia.

Liberty,  cuyo dueño es el multimillonario John Malone, descartó comprar las filiales de Telefónica en Colombia y Ecuador, probablemente pueda estar interesado en ese negocio.

Ahora, ¿en qué beneficia a Medellín? En cuanto a que más operadores pueden entrar con más libertad, equilibrio y justicia en el sector de telecomunicaciones, pues EPM se desprendería de esta industria y le abriría no solamente más espacio a compañías como Claro para que tengan menos inconvenientes y trabas a la hora de desplegar sus redes de telecomunicaciones, pues siempre ha existido una riña entre esos dos operadores; Claro requiere muchos permisos y licencias por parte de la administración y de EPM para desplegar dichas redes, y EPM con la participación en una sociedad que es competencia de Claro estaba en todo su derecho, sin violar la justa competencia, de cuidar su mercado sus clientes.

Claro ha logrado ralentizar ese desarrollo de red en la ciudad, pero para compañías como ETB, entre otras, le puede ser bastante útil y beneficiar al usuario finalmente. 

¿Cómo sería una eventual votación por este proyecto a nivel político? Este medio de comunicación ha conversado con varios concejales de la ciudad, quienes han pedido que se les guarde su identidad al no querer exponer las ideas preliminares que tienen sobre un voto. Esta claro que va a jugar un papel importante no solamente en la coalición sino la nueva oposición que tiene el alcalde.

Al día de hoy, este medio de comunicación contabiliza 14 votos positivos por este proyecto de acuerdo, lo que le daría al alcalde vía libre para la consecución de esta aprobación de la participación y así se le pueda dar trámite en la junta directiva de la compañía.

Última hora

Le puede interesar

[mc4wp_form id=»74432″]