En la apertura del 36º Simposio de Mercado de Capitales, Jonathan Malagón, presidente de Asobancaria, trazó un panorama con claros avances pero también alertas preocupantes para el sector. Aunque la inversión en Colombia ha mostrado señales de recuperación —alcanzando el 16,6% del PIB—, la profundidad del mercado sigue siendo limitada: su capitalización equivale apenas al 17,4% del PIB, una cifra inferior a la de economías comparables en la región.
Malagón señaló que este repunte de la inversión ha sido impulsado principalmente por el sector bancario y el programa Pacto por el Crédito, más que por el capital de los accionistas. Sin embargo, advirtió que persisten regulaciones que dificultan la emisión de valores y frenan la expansión del mercado de capitales.
El directivo destacó dos aspectos positivos. Por un lado, el índice MSCI COLCAP ha crecido un 31% en lo que va del año, superando a mercados como Chile (21%), México (17%) y Brasil (10%), e incluso a índices de plazas bursátiles globales como Londres (12%), Nueva York (8%) y Tokio (2%).
Por otro lado, resaltó el impacto de la plataforma a2censo, que canaliza recursos hacia pequeñas y medianas empresas y que en 2024 movilizó $17.000 millones, más del doble de su cifra inicial en 2019.
Mercado de Capitales, entre luces y sombras
Entre los factores que podrían desacelerar el mercado de capitales, Malagón enfatizó el deterioro de las finanzas públicas. Proyecciones para 2025 indican que el déficit fiscal podría superar los 7 puntos del PIB, llevando el endeudamiento nacional a niveles cercanos al 60% del PIB.
Este incremento del endeudamiento, explicó, genera presiones sobre los mercados de deuda, encarece el financiamiento y reduce la capacidad del país para aplicar políticas contracíclicas en momentos de crisis. El efecto inmediato es una menor confianza de los inversionistas, en especial en el mercado de renta fija pública, una pieza clave del mercado de capitales.
Malagón insistió en que el seguimiento de estas cifras es prioritario para evitar un impacto prolongado en la liquidez y competitividad del sistema financiero colombiano.
La incertidumbre pensional y su efecto
El segundo factor de riesgo que Asobancaria identificó es la incertidumbre en torno a la reglamentación del fondo pensional que administrará el Banco de la República. Aunque las autoridades han avanzado en la implementación de la reforma pensional, aún persisten dudas sobre el manejo de los recursos, los mecanismos de traslado y las garantías de transparencia.
Estos fondos, transferidos desde las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), tienen una participación del 31% en títulos de tesorería (TES) y representan flujos anuales superiores a $30 billones. Cualquier cambio en su gestión podría alterar la dinámica de la deuda pública y, por ende, afectar directamente al mercado de capitales.
Un mercado con potencial, pero en espera de reformas
El simposio dejó claro que Colombia tiene oportunidades para fortalecer su mercado de capitales si logra superar las barreras regulatorias, reducir la vulnerabilidad fiscal y garantizar la estabilidad de las reformas estructurales como la pensional.
Malagón concluyó que, pese a las “sombras” que ensombrecen el panorama, la valorización de la bolsa y el fortalecimiento de plataformas como a2censo muestran que existe un camino de crecimiento posible. El reto, dijo, es generar confianza sostenida para atraer más emisores e inversionistas.
El mercado de capitales colombiano, con su combinación de avances y desafíos, se encuentra en un punto decisivo. Las decisiones fiscales y regulatorias que se adopten en los próximos meses marcarán la pauta para su consolidación o estancamiento en el mediano plazo.