La afirmación de crediticia del municipio refleja las expectativas de Fitch sobre que, Medellín, mantendrá un desempeño operativo adecuado y niveles de deuda manejables.
Por: Redacción 360 Radio
Fitch Ratings prevé que el puntaje del índice de recuperación sea ‘aa’ y que las métricas secundarias tengan puntaje de calificación de cinco años, se trata del índice de cobertura del servicio de la deuda (ADSCR) y la carga de la deuda fiscal, que esperan, sea de 1,5x y cercana al 100 en 2005, respectivamente.
Las calificaciones de Medellín son la combinación de un perfil de riesgo de ‘rango medio bajo’ y una calificación de sostenibilidad de la deuda de ‘a’, de acuerdo con el caso de calificación de Fitch.
El perfil de riesgo de la capital de Antioquia en ‘Rango medio bajo’ es el resultado de la combinación de cinco factores de riesgo clave en ‘Rango medio’ y uno en ‘más débil’, esto refleja un riesgo moderadamente alto con relación con sus pares internacionales de que el emisor puede ver su capacidad para cubrir el servicio de la deuda con el saldo operativo con él.
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Los ingresos operativos de Medellín están compuestos principalmente por los ingresos predecibles, crecientes y estables como el impuesto a la propiedad (UIP), puesto a la industria y comercio (ICA) y las transferencias del estado colombiano (BB + / Estable).
El destacado perfil socioeconómico de Medellín permite una alta capacidad de recaudación de impuestos. Los ingresos representaron el 56% de los ingresos totales en promedio entre el 2016 y 2020, pese a los efectos de la pandemia en la economía local, el impuesto a la propiedad y las transferencias nacionales aumentaron 3% y 8,1% en 2020.
Desde el año pasado, Medellín implementó estímulos fiscales específicos o beneficios fiscales para aliviar el impacto de la pandemia de coronavirus en los contribuyentes, es decir, el Decreto 678 de 2020. Los beneficios fiscales impulsaron la recaudación tributaria al disminuir la cartera vencida.
A septiembre de este año, la recaudación tributaria de Medellín repuntó en 15% interanual sustentado en la reducción de la cartera vencida, la actualización de los valores catastrales y un aumento progresivo en la tarifa del ICA a las entidades financieras.