Los gremios Asojuegos y Fecoljuegos, que agrupan a las principales empresas del sector de juegos de suerte y azar en Colombia, expresaron su rechazo a las medidas incluidas en el proyecto de ley de financiamiento que está siendo impulsado por el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla.
Gremios de juegos de azar en Colombia rechazan la propuesta de IVA y otras medidas del proyecto de ley de financiamiento
El proyecto de ley de financiamiento que busca incrementar los ingresos del Estado incluye la imposición de un impuesto al valor agregado (IVA) sobre los juegos de azar, una medida que, según los representantes del sector, podría tener consecuencias devastadoras para la industria y la economía del país.
Ambos gremios, que representan a miles de empresas y empleos formales, destacaron que la falta de un diálogo técnico adecuado y transparente con el Gobierno podría ser la raíz de esta propuesta que consideran poco fundamentada.
Según Juan Carlos Restrepo, presidente de Asojuegos, el sector ha intentado mantener una comunicación abierta con las autoridades, pero lamenta que sus preocupaciones no sean escuchadas de manera efectiva. «Nuestro propósito ha sido siempre informar de manera clara sobre los impactos económicos y sociales que estas medidas traerían. Si eso se interpreta como presión, entonces estamos siendo privados de nuestro derecho a participar democráticamente en la toma de decisiones que afectan a nuestra industria», aseguró Restrepo.
La principal preocupación de los gremios se centra en el hecho de que el proyecto de ley incluiría a los juegos de azar, tanto presenciales como en línea, en la categoría de bienes y servicios sujetos al IVA, lo que, según los expertos, podría generar un aumento de precios, reduciendo la participación de los consumidores y afectando los ingresos destinados al sector de la salud, al cual el juego aporta una parte significativa de sus ganancias.
En una declaración conjunta, Evert Montero, presidente de Fecoljuegos, expresó su descontento con la falta de apertura por parte del Gobierno a un análisis más profundo sobre la realidad de la industria.
Según Montero, las medidas propuestas no solo están basadas en cifras erróneas sobre el sector, sino que carecen de una comprensión completa de cómo operan estos juegos, tanto en el ámbito local como en línea.
Los puntos más controversiales de la propuesta incluyen la imposición del IVA sobre los juegos en línea, el aumento de la tarifa de IVA presuntivo en juegos presenciales y la modificación de la tarifa de ganancia ocasional, que pasaría a ser del 25%.
Las empresas del sector sostienen que estas modificaciones no solo generarán una mayor carga impositiva, sino que también podrían poner en riesgo la estabilidad financiera de los operadores, disminuir los ingresos del Estado a largo plazo y afectar a miles de trabajadores que dependen de esta industria.
Los gremios han insistido en que el diálogo técnico es fundamental para evitar tomar decisiones apresuradas que podrían perjudicar a todos los colombianos. «El juego es una actividad regulada que genera miles de empleos y contribuye significativamente a la financiación de la salud pública. Si se aprueba este proyecto sin considerar su impacto real, no solo afectará al sector, sino a toda la sociedad», concluyó Restrepo.
La discusión sobre esta reforma fiscal continuará en los próximos días en el Congreso, mientras los gremios de los juegos de azar siguen buscando abrir espacios de diálogo para lograr un entendimiento que beneficie a todas las partes involucradas.
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