En una carta pública dirigida tanto a sus colaboradores como a la opinión pública, el presidente del Grupo Keralty, Joseba Grajales, lanzó duras críticas contra el presidente Gustavo Petro y algunos de sus funcionarios, luego de que la Corte Constitucional declarara ilegal la intervención del Gobierno a la EPS Sanitas.
La misiva llega luego de que el Presidente Gustavo Petro señalara que “El dueño de Keralty es un criminal en Colombia, debe irse, porque aquí está prohibido financiar las campañas con dineros extranjeros (…) así me toque hablar con el rey de España”.
El pronunciamiento de Keralty llega en un momento clave del debate sobre la salud en Colombia, cuando los entes de control han cuestionado varias decisiones del Gobierno Nacional en torno al manejo del sistema, particularmente frente a las EPS.
El fallo de la Corte, que declaró inconstitucional la intervención a Sanitas, se convirtió en el punto de inflexión para que el grupo empresarial se manifestara públicamente.
Keralty anuncia denuncias contra el presidente Petro y su equipo
Según Grajales, las recientes declaraciones del presidente Petro y de miembros de su gabinete son parte de una estrategia orquestada que, bajo una narrativa constante en medios de comunicación, busca minar la legitimidad y reputación de Keralty y sus filiales. “No solo constituyen un atropello a las instituciones, sino una campaña sistemática de desinformación, plagada de mentiras, calumnias e insultos”, advirtió el directivo.

El presidente del Grupo Keralty aseguró que ha dado instrucciones claras a su equipo legal para actuar con firmeza y acudir tanto a los tribunales nacionales como internacionales. “Vamos a denunciar no solo al presidente Gustavo Petro, sino también a los miembros de su equipo de gobierno que han colaborado en la difusión de estas mentiras, y a cualquier persona o entidad —pública o privada— que intente dañar, por acción u omisión, la imagen de este grupo”, dijo.
Aseguró que no permitirán que se mancille “con impunidad el nombre de quienes han dedicado su vida a servir a los demás con honestidad”.
La carta de Grajales tiene un tono profundamente ético y moral. Reivindica los valores de la organización y la trayectoria de quienes han construido Sanitas y Keralty durante décadas. «La honestidad, la honradez, la ejemplaridad y la trayectoria de una persona —y de una organización— no las conceden los resentidos», señala el presidente en su escrito.
Citando a pensadores como Platón, Aristóteles, Séneca y Kant, Grajales asegura que la virtud no puede ser destruida por quienes no la conocen ni la practican. La carta busca posicionar a Keralty como una organización construida sobre pilares éticos sólidos y ajena a “figuras con pasados oscuros y conductas que no son modelo para nadie”.
En una frase cargada de simbolismo, Grajales señala: “El ruido de la mentira no debe desviar nuestro rumbo. La historia siempre acaba por separar al justo del oportunista, al ético del manipulador”.
La legitimidad de Sanitas, en el centro del debate
El fallo de la Corte Constitucional que declaró ilegal la intervención a la EPS Sanitas, que forma parte del Grupo Keralty, se convirtió en la base jurídica para este pronunciamiento. El tribunal consideró que la medida del Gobierno vulneró principios legales, lo cual desató una ola de reacciones tanto desde el Ejecutivo como desde diversos sectores políticos y empresariales.
Desde la intervención, el Gobierno ha insistido en que su accionar se fundamenta en la necesidad de reformar un sistema que, en su criterio, privilegia intereses económicos sobre el derecho a la salud. Sin embargo, empresas como Keralty y buena parte del gremio de las EPS han advertido que la intervención podría poner en riesgo la sostenibilidad del sistema.
Keralty se pronunció tras declaraciones de @petrogustavo y dijo que habrá denuncias contra el presidente ante tribunales nacionales e internacionales. https://t.co/nB7P88I6xs pic.twitter.com/qxYVi4GL9E
— 360 Radio (@360RadioCo) July 16, 2025
El presidente Petro, por su parte, ha mantenido un discurso crítico y constante contra las EPS, y en varias ocasiones ha señalado a Sanitas como parte del problema estructural. Las palabras del mandatario, sumadas a sus intervenciones en medios y redes sociales, fueron calificadas por Keralty como un ataque sin fundamento que desconoce el trabajo de miles de personas que hacen parte del grupo.
Grajales insiste en que la justicia y la verdad deben prevalecer y que no puede permitirse que la mentira y la desinformación erosionen la confianza de millones de personas que confían en la labor de Keralty.
“Nuestra mejor defensa está en los millones de personas que confían en nosotros, en cada comunidad que cuidamos, en cada innovación que nace desde nuestro compromiso con la salud y el bienestar”, concluye el presidente.
Con este pronunciamiento, Keralty no solo se defiende, sino que se prepara para dar la pelea legal, mediática y ética en un escenario cada vez más polarizado entre el Gobierno y los actores privados del sector salud.