Para las personas del común el nombre de María Lorena Gutiérrez seguramente no les dice nada, pero para los que medianamente conocen de política y están en ella les dirá mucho. Todo gobernante, eso sí, los inteligentes y a los que les interesa gobernar bien, tienen una persona a su lado que es la encargada de desviar, absorber, poner filtros y ayudar a la evacuación de puntos importantes de determinado gobierno.
La doctora María Lorena lideraba lo que se podía llamar el «Bloque de mujeres del Gobierno», equipo en donde se encontraban Cecilia Álvarez Correa, Gina Parody, la señora «Tutina» de Santos, entre otras damas del presidente colombiano. Además Gutiérrez era la encargada de reunirse con el sector privado y era la delegada de importantes misiones asignadas por Juan Manuel Santos para controlar algunos temas que se pudieran salir de control; en ese mismo sentido el poder que fue adquiriendo fue inherente a todas las funciones que le eran atribuidas.
Gutiérrez se encargó de aislar algo a Juan Manuel Santos de la realidad, de solamente hacerle ver lo que él quería escuchar, lo que él quería que fuera, mientras que afuera de las cuatro paredes del Palacio el país estaba hirviendo.
La diferencias entre María Lorena con Néstor Humberto Martínez eran públicamente conocidas y no solamente con él. Lo cierto es que Gutiérrez es una mujer prepotente, orgullosa y tenía ciertas distancias con algunos ministros, congresistas y con algunos ilustres personajes que tienen oficina en el Palacio de Nariño.
La salida de la doctora Gutiérrez se vio como una clara respuesta a que el presidente Santos ternara al doctor Néstor Humberto Martínez a la Fiscalía; ella creyó que había ganado esa guerra, que moviendo algunas “arenas” haría que Martínez renunciara como lo hizo en el pasado, y pues con la terna que presentó Santos, a Gutiérrez se le rebosó la copa, por lo que la doctora María Lorena comenzó a decir en algunos de sus círculos que Santos no se dejaba hablar ni aconsejar y que se estaba cansando del asunto.
Tan pronto Juan Manuel Santos viajó a Nueva York, Gutiérrez redactó su carta de renuncia, la envió, señaló que es irrevocable e inició su trasteo hasta altas horas de la noche en el Palacio de Nariño.
Seguramente María Lorena Gutiérrez se encargará de reconfigurar su salario personal, pues tenemos entendido que el Presidente colombiano quiere tener una conversación con ella a nivel personal, no para pedirle que se quede en esa cartera, sino para que lo apoye en otra dependencia del Gobierno.
Sin lugar a dudas María Lorena Gutiérrez gozaba de ese preciado lugar del segundo poder en el Gobierno nacional; haciendo la comparación con la reconocida serie presidencial estadounidense, House of Cards, Gutiérrez venía siendo la Doug Stamper de Frank Underwood.
