Con dura carta, Eduardo Enrique Zapateiro Altamiranda, Comandante del Ejército Nacional, respondió al tweet publicado por Ernesto Samper, a propósito de los recientes casos que señalan a miembros de las Fuerzas Militares como responsables de abusos sexuales contra menores de edad.
Por: Redacción 360 Radio
El pasado 30 de junio, el expresidente de la república, Ernesto Samper, publicó en Twitter un trino en el que indicaba que decenas de militares seguían viéndose implicados en delitos sexuales sin ser condenados, en parte debido a que dentro de la institución no recibían una formación ética adecuada.
Frente a esto, Enrique Zapateiro, respondió a la mención, en su más reciente rueda de prensa sobre los casos afirmando que “ningún soldado es entrenado en la institución para atentar contra los derechos humanos de los niños, niñas y adolescentes”. Además, fue enfático al señalar como “descuidado” el comentario de Samper, pues como Presidente fue el máximo jefe del Ejército Nacional.
Así, el comandante del Ejército redactó también una carta, en la que reafirmó que “hasta la fecha nunca había tenido conocimiento de una situación tan aberrante, nadie me ha informado sobre ña existencia de semejantes contenidos en los planes de formación de nuestros soldados…”. Además, aseguró que, por medio de la Fiscalía General de la Nación, solicitará a Samper las pruebas pertinentes para corroborar sus acusaciones en contra de los miembros de la institución.
Así mismo, Zapateiro señaló que, en el presente año, se actualizaron los lineamientos y directrices relacionados con los derechos humanos y el Derecho Internacional Humanitario, para capacitar a los soldados en cuanto al trato de niños, niñas y adolescentes en circunstancias específicas. Además, según él, existen convenios con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) para “desarrollar acciones conjuntas en pro del actuar correcto en relación con los menores de edad”. Sin embargo, comentó que hasta ahora 3.000, de los 230.000 miembros del Ejército, han recibido dicha capacitación.
Desde 2016, la Fiscalía ha venido investigando a 116 militares involucrados en casos de abuso sexual de menores de edad, siendo el de una menor indígena de 12 años en Pueblo Rico, Risalda, el más reciente. Esta situación ha desencadenado nuevas denuncias como la de otra menor abusada en Guaviare el año pasado y una más en Bogotá en el 2018.